Ante el congestionamiento vial que sufren diariamente, residentes de Santa Fe solicitaron construir tres nuevas vialidades. Denunciaron que en 18 años no ha habido ninguna vía de acceso nueva, pese a que la población incrementó “exponencialmente” en esa zona del sur de Tijuana.
Actualmente están en proceso de construcción siete mil nuevas casas, dijo Fernando Martínez Granados, presidente del Comité Vecinal de la Segunda Sección Santa Fe, quien presentó por escrito la solicitud de las nuevas vialidades a la alcaldesa Montserrat Caballero y a Magaly Ronquillo Palacios, subsecretaria del Gobierno del Estado.
Las tres obras solicitadas consisten en un puente elevado que conecte el bulevar El Rosario con el bulevar Francisco Zarco. El puente iniciaría a la altura del Calimax de Santa Fe.
También se pide la construcción de la continuación del bulevar Banderas hacia la autopista Tijuana-Rosarito. Con ella, residentes de los fraccionamientos más cercanos a la costa (Cedros, Lomas de Tijuana, Viñas del Mar) evitarán pasar por Santa Fe, “buscando una conexión para que no paguen la caseta”.
La tercera propuesta consiste en pavimentar el acceso conocido como el bulevar Aztlán, conectando el bulevar El Rosario con la carretera libre Tijuana-Rosarito. Se pide una mejor ruta para “no mandar a la gente hasta Rosarito” cuando lo que quiere es ir a Tijuana, detalló el también secretario de la Asociación Civil Ciudadanos Unidos por la Seguridad y Bienestar de Tijuana.
Consideró que la ampliación de los carriles y la colocación de una glorieta en el bulevar El Rosario -iniciada en la pasada administración y concluida en la actual- es un “trabajo que está pensado y diseñado”, pero esa vialidad ya está saturada, debido al crecimiento poblacional.
“La glorieta no resuelve el problema de tráfico, tiene su capacidad; en horas pico es difícil porque ya está saturada”, pero quitarla y colocar semáforos, como algunos habitantes de las inmediaciones han pedido, sería “un gravísimo error”, aseguró el arquitecto.
Como parte del programa “Respira”, el gobierno estatal contempla una vía llamada Bulevar Sánchez Taboada, que conectará al bulevar Rosas Magallón con el Centro de Convenciones de Rosarito, cuya inversión requerida es de mil millones de pesos aproximadamente.
Sin embargo, se desconoce cuándo podría arrancar toda vez que sería financiada bajo un esquema de participación beneficiaria o referente al impuesto de plusvalía, con la que se prevé que desarrolladores de fraccionamientos -propietarios de las tierras por donde pasará la vialidad- la construirán en compensación del gravamen.