El amparo de un tribunal federal ordenó la reposición del procedimiento porque un juez de procesos penales no dio vista al Ministerio Público Federal para que investigara manifestaciones de tortura de Daniel Arizmendi
Un Tribunal Unitario en el estado de México dejó insubsistente la sentencia condenatoria de 40 años de prisión dictada hace varios años en contra del secuestrador Daniel Arizmendi López “El Mochaorejas” y su hermano Aurelio, luego de que un Tribunal Colegiado en Materia penal del Segundo Circuito le concediera el amparo y protección por fallas procesales.
El fallo no implica la libertad de los plagiarios que aterrorizaron a México en la década de los noventa, pues el asunto baja hasta el Juez de Distrito de Procesos Penales Federales que dictó la condena original para que reponga el procedimiento y subsane las pifias observadas por los magistrados del Colegiado.
Entre algunas de las violaciones procesales se detectó que el juzgador no dio vista al Ministerio Público de la federación para que iniciara una averiguación previa por las manifestaciones de presunta tortura formuladas en su momento por los hermanos Arizmendi López.
La reposición ordenada deberá ser hasta la diligencia previa al auto de cierre de instrucción para que el juez cumpla con lo ordenado y continúe con el proceso con libertad de que llegada la etapa, dicte una nueva sentencia con libertad de criterio.
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De acuerdo con lo manifestado por el quejoso en amparo, tanto él (Daniel Arizmendi) como su hermano Aurelio, y sus coinculpados, entre ellos sus cuñados Daniel y Dulce Vanegas Martínez, además de Francisco Javier Pérez Aguilar, fueron torturados por elementos de la entonces Procuraduría General de la República.
De un tiempo a la fecha, en México se han abierto investigaciones por casos de tortura denunciados muchos años atrás, cuando era una práctica común en los cuerpos policiales y de investigación. Así, casos ya sentenciados se reabren por las denuncias no atendidas de tortura, como recientemente se ha advertido en los casos de presos como Mario Aburto Martínez y Miguel Félix Gallardo.
Daniel Arizmendi López es considerado el secuestrador más famoso y sanguinario del país. Nació en 1958 en el municipio de Miacatlán, Morelos. En su juventud fue elemento de la Policía Judicial del Estado de Morelos. Luego de una gran cantidad de secuestros fue aprehendido el 17 de agosto de 1998, ingresando al penal federal del Altiplano cuatro días después.
“El Mochaorejas”, que cuenta con varias sentencias condenatorias, también ha estado preso en el desaparecido penal de máxima seguridad de Puente Grande.
