La ruta de los taxis Negro y Rojo comprende del Centro a La Presa, con su desaparición, afirman los taxistas, se verían afectados alrededor de 900 choferes y dos mil 500 familias de manera directa.
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Taxistas de la línea de transporte Negro y Rojo realizaron una caravana hasta el Instituto de Movilidad Sustentable de Baja California, en Tijuana (IMOS), para manifestarse en contra de la desaparición de su ruta para cambiarla por una nueva ruta troncal en el bulevar Díaz Ordaz.
La manifestación se dio éste jueves 18 de agosto en un predio baldío de la avenida Manuel Márquez de León, a ella acudieron alrededor de 300 taxistas de la línea Negro y Rojo, quienes acusaron IMOS de querer retirarlos debido a que otorgarán permisos de operación a una empresa de transporte nueva, que se hace llamar “Transporte Masivo Sustentable de Tijuana S.A de C.V.”, y en la que no serán incluidos.
Según el Secretario General de dicha línea de transporte, Joaquín Baltazar, la idea es que sea dicha empresa la que transporte a los pasajeros, para lo que es necesario que ellos dejen de trabajar en el bulevar Díaz Ordaz.
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“Es un proyecto que nos presentó el Instituto de Movilidad Sustentable, que pretende despojarnos de la ruta para que una empresa que acaban de crear entre a la ruta. Este proyecto nos desplaza de nuestro trabajo”, comentó el Secretario.
Según el dirigente de taxis Negro y Rojo circulo blanco, Víctor Sánchez, hay un proyecto de la empresa “Transporte Sustentable de Tijuana S.A de C.V.” que les ofrece ser accionistas a cambio de desalojar el bulevar, sin embargo, dichas acciones se quedarían dentro del marco de 50 mil pesos y cuando empresarios inviertan en ellas para obtener camiones, ellos se verán limitados e incluso corren el riesgo de perderlas.
“Lo que la empresa propone es que nosotros seamos accionistas, es una empresa constituida con el mínimo necesario, 50 mil pesos, dentro de esa cantidad estaríamos nosotros en sociedad, pero cuando venga la reinversión se reconstituye la empresa y nosotros nos quedamos igual. Un permisionario de nosotros escuchó la plática de IMOS y quiso invertir en dos camiones, pero le dijeron ‘no, ustedes los permisionarios no pueden invertir’. La balanza solo está inclinada a un lado, quieren que firmemos la sociedad, de lo contrario hay la amenaza de cancelar los permisos”, manifestó Víctor.
La ruta de los nuevos camiones de la empresa “Transporte Sustentable de Tijuana S.A de C.V.” abarcaría desde Centro-5y10-Presa-bulevar Díaz Ordaz-Aguacaliente, misma que estaría compuesta por 34 paradas, dos estaciones y solo 105 camiones, los cuales tendrán un valor de tres millones 800 mil pesos cada uno, algo similar al fallido SITT.
Los 300 taxistas se dirigieron a IMOS para entregar un escrito en donde le solicitan a la gobernadora de Baja California, Marina del Pilar Ávila Olmeda para que el proyecto denominado “Corredor Aguacaliente” se transparente y sea consensuado con los transportistas, a manera de no afectar su sustento.
La ruta de los taxis Negro y Rojo comprende desde el Centro hasta La Presa, con su desaparición, afirman los taxistas, se verían afectados alrededor de 900 choferes y dos mil 500 familias de manera directa.
Al respecto, el Director de IMOS, Jorge Alberto Gutiérrez Topete, declaró a ZETA que “no es así, estamos tratando de hacer una reestructura del corredor. Están desinformando, se propuso asociar a permisionarios y a Verde y Crema sobre una ruta concesionada, a este último desde hace décadas”.
El titular de IMOS aseguró que la oferta para los permisionarios es un “ganar-ganar”, pues los taxistas que cuenten con vehículo podrán seguir trabajando en las rutas de alimentación del Corredor Aguacaliente.
“Su inversión como permisionarios es aportar un permiso a cambio de una acción. Se les garantiza inicialmente un ingreso mensual mayor al que actualmente perciben y un aumento de los ingresos hasta un poco más del doble ya consolidada la operación. Además, a los que tienen permiso y cuentan con vehículo se les ofrece espacio para que trabajen en rutas alimentadoras. Ganar-Ganar”, explicó el director de IMOS.
En cuanto a que va a garantizar que esta nueva línea de transporte masivo funcione y no termine como el SITT, Jorge Alberto Gutiérrez aseguró que “es la misma fórmula de otros proyectos exitosos en México y Sudamérica. Se parte de organizar exclusivamente a los que ya operan en ese corredor”.
