El dos veces delegado municipal murió a los 74 años de edad; residentes del poblado lo recuerdan como un luchador social
Don Refugio Ayala Lara, delegado del poblado La Rumorosa, en Tecate, murió a los 74 años de edad, por causas naturales, en un hospital del Pueblo Mágico.
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Fue el alcalde Darío Benítez quien dio a conocer la noticia a través de sus redes sociales: “Es triste escuchar este tipo de noticias, nos duele en el alma el fallecimiento de Refugio Ayala Lara, Delegado de la Rumorosa, luchador de su comunidad y hombre que estuvo dedicado a su pueblo desde hace muchos años. Extiendo mis más sinceras condolencias a familiares, amigos y conocidos, pronta resignación”, escribió.
Ayala Lara nació en Mexicali, pero desde hace 62 años residía en la delegación que dirigió en dos ocasiones; de 2005 a 2007, y de enero de 2022 hasta el momento de su fallecimiento.
Don Refugio fue uno de los seis delegados municipales que resultó electo por su comunidad en las primeras votaciones ciudadanas realizadas en diciembre de 2021.
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En entrevista para ZETA, luego de que resultó electo, manifestó que en su delegación habitan alrededor de tres mil personas y dentro de sus necesidades es que el centro de salud opere al 100 por ciento y amplíe su horario de servicio, además de que se requieren ambulancias.
Don Refugio contó a este Semanario que las necesidades por las que atravesaba la demarcación compuesta por alrededor de 13 colonias y las comunidades de Jacume, El Cóndor, Pino Suárez, Aubanel Vallejo y La Salada (Benito Juárez), siguen siendo las mismas desde hace muchos años.
“Una de las principales demandas que la gente solicita es que el Centro de Salud extienda su horario de servicio, ya que actualmente es de ocho de la mañana a dos de la tarde, por lo que se requieren más médicos para que atiendan el resto del día”.
El extinto delegado municipal, quien era ejidatario, será recordado como un hombre trabajador y luchador por su pueblo.
“Tengo fe de que vamos a salir adelante, vamos a buen paso en este regreso a la delegación. Eso fue lo que la gente me pidió. No pensaba llegar a la delegación, pues yo tengo mi trabajo, soy ejidatario, tengo mi negocio de dompes; pero la gente me convenció porque cuando fui delegado hice el centro de salud, la Cruz Roja, Bomberos, una biblioteca y terminamos un bulevar que tenía 10 años en construcción. La gente me pidió, me dijo ‘vente porque hay necesidades’”, relataría el entonces funcionario municipal.
Descanse en paz.
