La nueva variante del virus SARS-CoV-2 se caracteriza por una velocidad de contagio más rápida que la Delta y con síntomas más leves en personas vacunadas, pero aquellas que no lo están, corren el riesgo de hospitalización más grave y podría desatar la cuarta ola de COVID, al hacer simbiosis con enfermedades de temporada como la influenza. La Organización Mundial de la Salud reporta que el 73% de los casos de COVID-19 en la Unión Americana corresponden a Ómicron
La multimutación de la variante de preocupación COVID-19 Ómicron (B.1.1.529), ha puesto en cuarentena y alerta, una vez más, a países del primer mundo y con un amplio avance de vacunación. En ese sentido, Baja California es uno de los estados con mayor tasa de inoculación, pero las hospitalizaciones siguen en aumento, sobre todo en Tijuana y Mexicali, y la llegada de esta nueva variante, la cual es más peligrosa que la Delta, colapsaría los hospitales en la entidad.
Esta variante apareció por primera vez en Sudáfrica el 24 de noviembre, en uno de los continentes con menor tasa de vacunación a nivel mundial, lo que propició una mayor rapidez en los contagios, hospitalizaciones y defunciones a causa de COVID-19. No tardó mucho tiempo en aparecer en Europa, posteriormente Canadá y, una semana después, ya en diciembre, en California, Nueva York y Tennessee, Estados Unidos.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la variante Ómicron contiene un alto número de mutaciones -alrededor de 50-, algunas de ellas -30- de preocupación, ya que estarían asociadas con un potencial escape inmunológico de mayor transmisibilidad, pues cuentan con mayor cantidad de proteínas Spike, que son las que ayudan al anclaje de la enfermedad.
Desde hace dos semanas que aparecieron los primeros casos importados en Estados Unidos, específicamente en California y Nueva York, se especuló que la variante ya podría estar en México, dado que la propia OMS refiere que el 73 por ciento de los contagios en el vecino país, corresponden a esta nueva variante, menos letal, pero de mayor nivel de contagio.
El doctor Samuel Ponce de Léon Rosales, coordinador de la Comisión Universitaria para la Atención de la Emergencia del Coronavirus, señaló que, al ya estar detectada en estados fronterizos, era probable que Ómicron ya estuviera en México.
Al respecto, José Adrián Medina Amarillas, secretario de Salud en el Estado, comentó en entrevista con ZETA que es casi un hecho que la variante se va a presentar en Baja California y posteriormente se volverá la predominante, así como ahora es la Delta; sin embargo, hasta el momento no se ha detectado.
“Sabemos que la nueva variante va a llegar aquí, si ya está en San Diego, es cuestión de tiempo para que llegue. Nos estamos preparando para su llegada, pero a final de cuentas se trata de no bajar la guardia y continuar con la campaña de vacunación y de la aplicación de los refuerzos”, mencionó el funcionario.
CIERRAN SAN DIEGO OTRA VEZ
La variante Ómicron tiene mayor velocidad de contagio, incluso entre personas que ya tuvieron COVID-19 o vacunados, sin embargo, causa síntomas menos graves y los pacientes requieren menos oxigenación.
En pacientes no vacunados la realidad cambia un poco, ya que los que llegan al hospital, se prolonga su estadía, informó Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS.
Tras siete casos locales detectados en San Diego, California, es decir, que no fueron de personas que habían viajado a países donde existe la presencia de esta variante, el condado volvió a tomar medidas restrictivas para proteger a sus ciudadanos.
Entre ellas, otra vez el uso de cubrebocas obligatorio en lugares cerrados, la disminución en el aforo y la exigencia del certificado de vacunación. Otros países han tomado medidas, incluso más extremas, al volver al confinamiento por tiempo indefinido, como en Alemania, Reino Unido y Francia; al tiempo que la OMS hace un llamado para cancelar los festejos decembrinos de Navidad y Año Nuevo.
En contraste, en México y Baja California no se ha considerado hacer lo propio, pese a que no se ha terminado de salir de la tercera ola, cuando la cuarta ya había llegado junto con la temporada invernal.
Si bien BC cuenta con una tasa de vacunación del 83%, sobre todo ahora que ya inició la vacunación a menores de 15 a 17 años con comorbilidades, y se convirtió en uno de los estados con mayor avance en este rubro, también sigue siendo uno de los más vulnerables.
Baja California, junto con Ciudad de México, fue uno de los que presentó la mayor cantidad de contagios a nivel nacional desde que COVID-19 llegó al país.
También fue de los primeros en colapsar sus sistemas de hospitales y estuvieron al 100% de ocupación durante diciembre de 2020 y enero de 2021, cuando entre ambos meses, registró más de 2 mil muertes, a pesar que se contaba con el apoyo de la iniciativa privada y hospitales auxiliares por parte de la Secretaría de la Defensa Nacional.
HOSPITALIZACIONES AUMENTAN
Desde que inició diciembre, la ocupación hospitalaria ha ido en aumento gradual en el Estado, sobre todo en Mexicali, sin embargo, el Comité Científico de la Secretaría de Salud insiste en que la situación está controlada y no volverá a suceder una saturación.
De acuerdo con reportes emitidos por la Secretaría de Salud, la ocupación de camas en sus hospitales generales con atención COVID ha incrementado.
Al 31 de octubre de 2021, al término de la administración de Jaime Bonilla Valdez y Alonso Pérez Rico al frente de la Secretaría de Salud, la ocupación hospitalaria era de 60%; siete días después, ya con José Adrián Medina Amarillas como titular de la dependencia sanitaria, la ocupación había subido al 70%.
Al 20 de diciembre, la ocupación en hospitales de Isesalud llega al 89%, con 174 camas ocupadas de 195 disponibles.
Al respecto, Clemente Zúñiga Gil, director del Hospital General de Tijuana, precisó a ZETA que actualmente son tres pisos del nosocomio los destinados a pacientes COVID, además del área de Urgencias, pero de requerirse, se podrían abrir un par de pisos más, pues el 6 y 8 están destinados a pacientes pediátricos y oncológicos.
“Tenemos que aprender a vivir con esta nueva normalidad y no podemos seguir dejando de lado otras enfermedades, COVID no se va a ir y no podemos volver a cerrar todo, lo que sí es un hecho es que la vacunación ha sido parte importante y fundamental para poder estar ahorita a como estábamos hace un año”, resaltó Zúñiga.
En Mexicali la situación es diferente, al ser uno de los municipios con mayor cantidad de contagios. Al 20 de diciembre de 2021, registró 38 nuevos contagios y una defunción, así como 897 casos activos.
Sin embargo, se ha tenido que recurrir a la habilitación del hospital auxiliar de la Universidad Autónoma de Baja California (UABC) para desahogar las camas del Hospital General.
En el auxiliar se traslada a los pacientes que no requieren cuidados especiales, que no son de gravedad, o bien, que ya se han recuperado de la enfermedad y sólo están en observación antes de ser dados de alta.
Sobre el tema, el titular de Salud, José Adrián Medina Amarillas, expuso que se habló con empresarios para volver a instalar hospitales auxiliares, pero no ha obtenido una respuesta favorable, ni siquiera con la asociación civil Apoyemos Tijuana, del equipo de baloncesto Zonkeys de Tijuana, quienes en 2020 usaron su auditorio como hospital.
“Hemos hablado con empresarios sobre volver a habilitar hospitales auxiliares, pero no hemos obtenido una buena respuesta, simplemente no se ha dado, no hemos coincidido, por eso estamos tomando otras alternativas, sólo con el fin de estar listos en caso de otro incremento”, informó a este Semanario.
Medina Amarillas adelantó que en Tijuana, otra de las ciudades con mayor cantidad de contagios y hospitalizaciones por su cantidad de población, se habilitará el centro de salud de La Morita, también como unidad auxiliar, “tenemos ese edificio ahí que no estamos usando, ya se acordó habilitar como unidad auxiliar, para los pacientes que ya vayan de salida, que terminen su tratamiento ahí y dejar las camas del General para los que lo necesiten”.
SÓLO EL 10 POR CIENTO
Actualmente la Secretaría de Salud y el Instituto Mexicano del Seguro Social realizan alrededor de mil pruebas diarias para detectar COVID-19, mientras que el índice de positividad está al 46%, es decir, 4 de cada 10 salen positivos a la enfermedad.
Asimismo, 8 de cada 10 que requieren intubación, no están vacunados y son los más vulnerables ante las variantes Delta y Ómicron, ya latente en BC.
Por otro lado, sólo el 10% de las pruebas PCR y de antígeno que se realizan en esta entidad federativa se envían al Centro de Referencia Epidemiológica para detectar otro tipo de variantes.
Para finalizar, el titular estatal de Salud dijo que por ser una sola región, también se envían muestras de PCR y antígenos a la Universidad de California en San Diego para determinar la presencia de variantes, pero hasta el momento sigue sin detectarse la variante Ómicron.