El negocio de la música continúa mutando en ecosistemas digitales, abriendo espacios para todos los músicos y creadores de contenido en plataformas de streaming, así como en redes sociales. Agregadoras como OneRPM, representan artistas independientes; distribuyen, gestionan derechos mecánicos (regalías) y comparten procesos de la industria
Los nuevos hábitos de consumo en el mundo transformaron a la industria de la música, y viceversa; hoy en día las audiencias se volcaron a lo digital, pasando por la venta de discos, y canciones a través de sistemas como iTunes, hasta la desaparición de la venta física.
Con ello, las disqueras buscando mantenerse vigentes en el negocio se convirtieron en alimentadoras de contenidos, apostando por sencillos; al mismo tiempo que la tecnología permitió que los creadores independientes lograran no solo ser dueños de la producción de su música, sino de poder distribuirla gracias a las agregadoras: nuevos intermediarios como OneRPM, quienes ofrecen soporte para en un clic, poner contenidos digitales en el planeta, y gestionar sus regalías.
Conscientes de la mutación de la industria de la música, artistas de la talla de Pepe Aguilar, Emmanuel, Playa Limbo, Gera MX, Bobby Pulido, Original Banda Limón, Camilo Séptimo, y La Gusana Ciega, utilizan compañías como OneRPM (onerpm.com), para distribuir sus propias producciones musicales y encarar la revolución del negocio:
“Hoy recurrimos a Spotify, Apple Music, Google Play, Podcast, YouTube y Blogs para escuchar música, sin embargo el mercado continúa cambiando; la tendencia es a simplificar conceptos, y ofertar contenidos de corta duración (TikTok, Reels en Instagram, o “shorts” de YouTube); por otro lado, el negocio se diversificó tanto que los artistas ya no necesitan de una disquera ni estudios para grabar, lo hacen desde una computadora y siguen su camino independiente”.
“Para ese nuevo proceso entramos las agregadoras con el tema de la distribución y recolección de sus derechos de la reproducción de su master. Ahora lo que busca el artista es llegar a mayor audiencia y alcance”, explicó Miguel Sainz, director de Marketing de OneRPM.
“Aunque el artista puede ser el dueño de su contenido, no puede simplemente tocar la puerta de Spotify y negociar por su música; necesita de un ente establecido que distribuye contenidos digitales, soporte que bien han aprovechado artistas como Pepe Aguilar, Emmanuel o la Banda MS, que son artistas independientes. Y que el término no tiene que ver con género, ser creador emergente, sino se refiere a ser dueño de su contenido. Hay artistas independientes de todos los tamaños y géneros”, agregó Sainz.
Al respecto, señaló que en OneRPM ofrece el servicio de agregadora en dos modalidades: DIY (Do It Yourself), que atiende la misión de apoyar a todos los creadores de contenidos en la distribución de sus obras; y Next Level, en el que presentan servicios como administración de derechos, reportes y análisis, servicios editoriales, marketing musical, project management, planeación estratégica, publicidad, administración de YouTube, financiamiento, y relaciones públicas, entre otras.
“Las agregadoras estamos dando el servicio de disquera en este nuevo mundo digital, interactuando con sus tendencias; mientras las disqueras quieren ser agregadoras porque perdieron la venta física y digital, el propio artista ya no le importa que le paguen por su contenido. Y esto sigue mutando”, explicó.
“La siguiente apuesta de la industria de la música son los nuevos modelos de consumo, de las distintas formas y lugares donde monetizamos. Por ejemplo, Reels y TikTok, que son relativamente nuevos en México, y tenemos mucho por aprender con los cambios de Facebook, que representan un muy buen ingreso para los creadores de contenido; diversificarnos con el negocio, posicionarnos con las audiencias que se mueven hacia Twitch.tv, y Live Streaming”.
“Existen una necesidad de mercadear los contenidos y entender las tendencias de la tecnología y audiencias, porque el factor principal del crecimiento económico del entretenimiento son las plataformas de streaming y las redes sociales. La relación romántica de la música es muy mínima, por ello Apple ya no promueve iTunes, sino Apple Music”, concluyó.
