Por el desmonte de áreas de conservación para construir un camino que conduce hacia unos terrenos en venta en el Ejido El Porvenir, en una colina a espaldas de Viñedos Bibayoff, la Secretaría de Economía Sustentable y Turismo, junto con elementos de la Fiscalía General del Estado, suspendieron las obras realizadas por particulares.
La tarde del lunes 17 de mayo funcionarios y agentes estatales arribaron al lugar para detener la destrucción ambiental denunciada -vía escrito formal- el 14 de mayo y refrendada de manera verbal el sábado 15 de mayo en una reunión entre productores vitivinícolas, el gobernador Jaime Bonilla y funcionarios de su gabinete, en el Valle de Guadalupe.
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Los denunciantes expusieron que integrantes del Ejido El Porvenir están “dando al traste” con el área de conservación en su afán de vender terrenos, los cuales son promocionados a través de WhatsApp en 70 mil dólares, pagaderos a tres años, por una superficie de dos mil 500 metros cuadrados.
En tan solo tres días, indicaron, los fraccionadores hicieron un camino de 2.5 kilómetros de longitud en área de conservación, sin tener los permisos correspondientes, “produciendo, desequilibrio ecológico, así como daños al medio ambiente y recursos naturales, actos que contravienen las disposiciones legales que regulan la protección ecológica”.
En la denuncia presentada ante la SEST el 14 de mayo, los quejosos revelaron que personas con maquinaria pesada y un vehículo con el logotipo “Transportes Santa Lucía” estaban abriendo brecha en la zona mencionada.
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Los denunciados cometen daños al medio ambiente al cambiar el uso de suelo, afectan la biodiversidad, infringen el Programa de Ordenamiento Ecológico del corredor San Antonio de las Minas-Valle de Guadalupe, violentan la Ley de Asentamientos Humanos, Ordenamiento Territorial y Desarrollo Urbano del Estado, así como la Ley General de Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente, precisaron en la denuncia proporcionada a ZETA.
Acuerdan frenar anarquía
En lo que resta de la administración estatal se creará una comisión intersecretarial para trabajar en coordinación con los productores vinícolas, a fin de desarrollar acciones de desarrollo sustentable y, en especial, frenar la anarquía inmobiliaria.
Lo anterior trascendió durante una reunión de productores de dicha región, el gobernador Jaime Bonilla, el secretario de gobierno Amador Rodríguez Lozano, así como los titulares de Sidurt, SEST, del Agua y Secretaría del Campo y Seguridad Alimentaria.
En su intervención, el consejero del Comité Provino Baja California y vocero del sector vitivinícola para el desarrollo sustentable, Fernando Pérez Castro, alertó que 80 por ciento de las viviendas del valle carecen de drenaje y 800 cuartos de hospedaje no cuentan con suministro de agua.
Anticipó que para 2030 esta región vinícola podría contar con dos mil 800 habitaciones de hotel y registrará una afluencia de 1.5 millones de visitantes; de no tomarse las medidas urgentes, se podría generar un colapso ecológico, alertó.
Señaló que esta es una zona con vocación única y preocupa la pérdida de la agricultura, por lo que pidió acciones inmediatas y enérgicas que frenen el desarrollo inmobiliario anárquico.
