De Trez en Trez
Uno.- Con su gobernador Jaime Bonilla Valdez contagiado por segunda vez de COVID-19, varios funcionarios estatales y municipales también infectados por el virus y los casos multiplicándose entre su población, Baja California pasó el lunes anterior a semáforo rojo, tratándose de la pandemia que padecemos desde hace diez meses.
Y con ello, se suspenden hasta nuevo aviso las actividades en varios rubros, entre ellas las religiosas, los salones de eventos, conciertos, parques de diversión, gimnasios, albercas, Spas y por supuesto los bares.
También se redujo el aforo permitido en supermercados (50%); cines, teatros, restaurantes y cafeterías (30%); centros comerciales, hoteles, parques y plazas (25%); peluquerías y estéticas (15%), preferentemente con cita previa.
Desde luego, este regreso a “semáforo rojo” se debe a que, como sucede con los señalamientos viales (los semáforos de verdad), no son respetados por muchos y los conductores no dudan en acelerar en amarillo, o de plano pasarse la luz roja, aun sabiendo que puede haber consecuencias negativas.
Así con el semáforo de la pandemia; aunque somos muchos los que tratamos de respetar las indicaciones, hay otros más que les vale puro “tubérculo poblano” y por ahí siguen de visita con sus amistades, en fiestas de todo tipo, celebrando la muy “mexicana alegría,” pasando por alto las medidas de prevención básicas.
Doz.- Por otra parte, se ha relajado las recomendaciones y acciones de preventivas en lugares públicos; termómetros que no funcionan, gel antibacterial de dudosa composición (cuyo recipiente está lleno de mugre) y tapetes “sanitizantes” de adorno (sin líquido alguno), nomás -como dice mi nonagenaria abuela- “pa’taparle el ojo al macho”. De la sana distancia mejor ni hablar, solo hay que ver las filas afuera de los bancos y otros lugares harto concurridos.
Otra situación importante que contribuye al aumento de contagios es la poca o nula vigilancia que se hace de las unidades del transporte público: Pasajeros amontonados en la calafia, el taxi, los minibuses o camiones urbanos, sin cubrebocas y escasa medidas de prevención…
Tampoco se restringe o se controla el ingreso de personas de Estados Unidos a nuestro país por las garitas de BC -lo que sí sucede desde hace meses en sentido inverso-; de esta forma, el virus va y viene, vuelve y regresa de California a todo el estado como “John por su house”.
Cierto, no se puede ya ser tan estricto en las medidas a tomar, la economía de muchos prende de hilos muy delgados; aquellos que viven al día y que, de no trabajar o ver sus fuentes de trabajo cerradas lo pasarían muy mal; ya de por sí han padecido mucho. Mesura, consideración, empatía, responsabilidad y respeto entre gobernantes y gobernados sería lo ideal.
Trez.- Pero hay otros más que están aprovechando la ocasión; a pesar de lo anterior, la publicidad de lugares para celebrar “posadas navideñas” abunda, lo mismo la de los destinos turísticos y de las líneas aéreas.
Al ver las ofertas en boletos de avión, ahí van los paseantes, se encaraman a la aeronave para disfrutar de una “vacaciones” baratas; fuera de tiempo, pero con mucho riesgo… Total, los chamacos están “aprendiendo en casa”, nadie notará sus “faltas” y se llevan sus computadoras para seguir con el home office desde su turístico destino; el jefe ni cuenta se da que no están en casa, pero… la presunción puede más y tan rápido como llegan suben sus fotos al Face. No son pocos los que han regresado contagiados.
Total, en tanto la pandemia continúa y llegan las vacunas -que en el papel luce bien el esquema planteado para su aplicación-, vaya un llamado más a extremar precauciones y a no empeorar las situaciones harto difíciles que aún nos esperan para 2021.
P.D1.- Y en medio de la pandemia, aquí, allá y más allá, la violencia y la inseguridad continúan con toda impunidad.
P.D.2.- Usted, ¿se juntaría con alguien que supuestamente no puede ver ni en pintura? Pues el PRI, el PAN y el PRD sí. ¿Valdrá la pena esta “promiscuidad partidaria”?
Adendum.- (14/12/2020, 15:30 horas, acumulo otra vuelta al sol). OMG!
Óscar Hernández Espinoza es egresado de la Facultad de Derecho por la UABC y es profesor de Cultura de la Legalidad y de Formación Cívica y Ética en Tijuana. Correo: profeohe@hotmail.com