“El periodismo crítico sufrió el 24 de noviembre una baja importante”, expresaron miembros de la Red Baja California Sur de Periodistas, luego de la muerte del periodista Ezequiel Lizalde Rodríguez, quien falleció por secuelas del contagio del nuevo coronavirus, después de haber denunciado que fue presionado para trabajar en medio de su recuperación.
Desde el 30 de octubre, la Red denunció que la recaída de Ezequiel Lizalde tuvo relación con “conductas insensibles empresariales por parte de su empleador, CPS Noticias. Testimonios del periodista fallecido exponen que la empresa no le permitió el reposo necesario o trabajar desde casa”.
Entre recortes de salario en su empresa por la pandemia y periodos de incapacidad, según su propio testimonio, el periodista vivió una situación precaria económicamente. Esto lo orilló a solicitar apoyo a los ciudadanos para subsistir.
Tras haberse recuperado de la COVID-19, el periodista quedó con secuelas que requerían tratamiento. En ese proceso, solicitó a sus empleadores la oportunidad de realizar trabajo desde casa; sin embargo, se le negó esa posibilidad.
La Red de Periodistas advirtió que los derechos laborales de Ezequiel fueron violentados, por lo que hicieron un llamado a la Secretaría del Trabajo y Previsión Social federal, a la Secretaría del Trabajo y Desarrollo Social de Baja California Sur, y al Instituto Mexicano del Seguro Social (Imss) para que investiguen posibles negligencias y actuaciones contrarias a la responsabilidad social corporativa.
Para la red, el caso de Ezequiel Lizalde evidencia la vulnerabilidad en las que se encuentran miles de trabajadores en todos los sectores del estado. Los empleados se ven obligados a continuar con sus actividades, pese a haber sobrevivido o incluso estando contagiados de COVID.
“Por ello, consideramos que las omisiones o negligencias empresariales y de la autoridad, incidieron en que nuestro compañero enfrentara una muy difícil recuperación de las secuelas de COVID-19”, detallan los miembros de la red.
“Tenemos conocimiento por testimonios de colegas y trabajadores, que las decisiones empresariales de CPS Media, desde falta de protocolos de seguridad para evitar contagios entre su personal hasta la reducción de salarios, son replicadas en sus diferentes plazas donde se producen los contenidos para Radio, Televisión y Prensa”, recalcan.
De acuerdo con el seguimiento de la asociación Article 19, Ezequiel Lizalde es el periodista número38 que fallece por COVID o secuelas del virus.
Después de las manifestaciones del gremio periodístico iniciadas en octubre, el 5 de noviembre, Hugo Lynn Almada, director corporativo de Información y Noticieros de CPS Media, publicó una columna en la que da su versión de los hechos.
Asegura en el escrito que cuando el reportero regresó de su primera jornada de incapacidad, le manifestó la propuesta de realizar trabajo desde casa durante tres meses. En respuesta, Hugo Lynn expuso que exhortó al trabajador a solicitar una ampliación de incapacidad en el Imss.
“Según su dicho, así lo hizo y en el Imss le negaron la ampliación solicitada”, dice Lynn Almada en su publicación.
En este punto, comenta, le ofrecieron a Ezequiel Lizalde trabajar desde su escritorio en las instalaciones de la empresa. “Ezequiel aceptó ese arreglo y desde la redacción de CPS Media La Paz trabajó en ese periodo, hasta que nos informó que su estado de salud estaba desmejorando otra vez y entonces le dimos la opción de trabajar desde su domicilio”,
El reportero expuso que este acuerdo con la empresa no le ayudó a recuperarse, el simple traslado en transporte público a las oficinas ya representaba una tarea “titánica” en su condición.
“CPS Media ha protegido a Ezequiel Lizalde y a todo su personal en este proceso. Ahí están todos los colaboradores que han padecido el Covid-19 para rendir su testimonio. Nadie ha sido descobijado, nadie ha sido abandonado. Todos han sido apoyados de una u otra manera”, insistió Hugo Lynn.
