El periodista mexicalense, Sergio Haro Cordero, fue reconocido por la Universidad Autónoma de Baja California (UABC), por su labor social y humana, a través de su ejercicio en los medios de comunicación.
El “Reportero”, como fue reconocido a raíz del documental producido por Bernardo Ruiz, fue recordado en un acto realizado el martes 15 de diciembre en el Aula Magna de la Facultad de Ciencias Humanas de la Universidad Autónoma de Baja California (UABC), que se transmitió vía redes sociales debido a las restricciones de salud originadas por la pandemia.
Al filo de las 10 de la mañana inició el evento encabezado por el secretario general de la UABC, Edgar Ismael Alarcón Meza, y el director de la facultad, Jesús Adolfo Soto, además de la esposa de Haro Cordero, Zaida Olivia Montoya Mascareño, y su hijo Luis Carlos Haro, quienes hicieron una remembranza de los años como periodista en medios como ZETA y el semanario Siete Días, donde destacó debido a su postura crítica hacia los gobiernos, pero también con una perspectiva de apoyo a las causas sociales de Baja California, a quienes les dio voz a través de todos los espacios donde tuvo la oportunidad de colaborar.
Del mismo modo, recordaron que Haro Cordero siempre se ofreció a participar en cualquier espacio donde pudiera enseñar a los jóvenes sobre la ética reporteril y el perfil humano que deben mantener el periodismo.
Al final del acto, los pocos asistentes se trasladaron a la explanada exterior de la facultad, donde develaron una placa en memoria de Sergio y anunciaron formalmente que este espacio en la Universidad llevará su nombre, como un recordatorio de sus aportaciones al periodismo y a la sociedad.
Haro Cordero estudió en esa misma facultad la carrera de Licenciado en Educación, pero desde joven su postura contestataria lo inclinó a ejercer el periodismo durante más de 30 años, donde se caracterizó por ser una “pluma” aguerrida contra la opresión gubernamental.
Días antes de fallecer, en mayo del 2017, Sergio Haro convocó a los periodistas de Baja California a organizar una red de protección, cuyo objetivo era garantizar la seguridad personal y digital de los compañeros del gremio.
