Crear nuevos juzgados familiares, fortalecer la justicia alternativa y cerrar juzgados tradicionales en Tijuana para redirigir esfuerzos al sistema oral, son las tres prioridades del magistrado presidente del Tribunal Superior de Justicia de Baja California, Alejandro Isaac Fragozo López, quien la primera semana de noviembre fue nombrado representante de los jueces supremos del Estado con el respaldo de 10 compañeros. En entrevista para ZETA habló de sus proyectos, de su intención por deshacer los grupos políticos dentro del Poder Judicial -aunque reconoce que surgió de uno- y de su relación con el gobernador Jaime Bonilla Valdez. También se comprometió a que harán un diagnóstico y un protocolo para la atención de la violencia de género dentro del Poder Judicial
El magistrado presidente del Tribunal Superior de Justicia del Estado, Alejandro Isaac Fragozo López, sabe perfectamente que el escenario al que se enfrenta el Poder Judicial de cara al 2021 es complicado. Desde el ámbito presupuestal, los intereses políticos externos e internos, sin mencionar las presiones directas de su encargo y los estragos que hoy en día ocasiona la pandemia derivada de la COVID-19.
Con apenas tres semanas en el cargo, el nuevo presidente del Tribunal Superior de Justicia del Estado y todavía del Consejo de la Judicatura, recibió a ZETA en su oficina ubicada en el Centro Cívico de Mexicali, para externar sus principales proyectos, pero también el escenario político que prevalece alrededor del Poder Judicial.
“Yo no estoy casado con la onda grupera”, bromeó, aludiendo a la urgencia de lamer las heridas que dejó la última elección de Presidente, y trabajar en conjunto para unificar al órgano supremo de justicia en Baja California.
Fragozo López aseguró que sus tres principales ejes de gobierno son fortalecer los juzgados familiares, la justicia alternativa y reducir el número de jueces tradicionales en el municipio de Tijuana; también se comprometió a elaborar un diagnóstico y un protocolo para atender y prevenir la violencia de género.
— ¿Cuáles son las principales exigencias en el Poder Judicial?
“Lo que tratamos de buscar es la sensibilización del Poder Judicial, queremos que esté cerca de la gente, amigable, cercano; es por eso que nos dirigimos a ciertas áreas, pero reforzando algunos aspectos de urgencia para que la gente crea en el Poder Judicial. Estamos hablando de la Justicia familiar, de la Justicia Alternativa y el fortalecimiento y adecuación del Sistema de Justicia Acusatorio”.
“Básicamente tenemos otros proyectos estratégicos, otros que son un imperativo legal, pero nuestros ejes son esos tres”.
— La justicia familiar ha sido abandonada y la penal está saturada, ¿cómo desarrollarán estos temas?
“En la justicia familiar tienes toda la razón, está un poco olvidada; queremos eficientizar los juzgados, particularmente en Tijuana, queremos aperturar más juzgados familiares. Sabemos que la situación nacional y el Estado tienen plena intención de ayudarnos, pero con la pandemia va a ser un año difícil, el Estado tuvo una recaudación menor. Sabemos que vienen recortes para los Estados, desconozco de cuánto para Baja California, pero por eso tenemos que generar cuestiones creativas, con el mismo presupuesto”.
“La constancia en el Poder Judicial es la falta de presupuesto; lo que hemos hecho en todos los juzgados es agregar actuarios y secretarios, pero eso te genera un embudo, y a la postre tenemos a Baja California con los juzgados más grandes del país. Hay Estados con dos secretarios, un actuario, y aquí tenemos cinco secretarios con cuatro actuarios”.
“En lugar de eso buscaremos más juzgados pequeños, necesitamos más gente que resuelva; en lugar de tener tres personas en todo Tijuana, queremos tener seis con el mismo personal. La Federación ya lo hizo hace como 25 años, con los juzgados BIS, que a la postre se separaron”.
“Obviamente solicitamos un presupuesto mayor, pero conocemos la situación. También consideramos los Cecofam (Centros de Convivencia Familiar); tenemos en puerta ya terminado uno en Mexicali, en Tecate otro que debemos equipar, y ver cómo habilitamos uno en Tijuana y Ensenada. No puede ser que en Baja California las convivencias familiares se hagan en restaurantes de comida rápida o en el juzgado, el actuario va a un lugar de hamburguesas y ahí lleva niños y ahí revisan si hay alineación; ahí verifican entre los comensales, igual en los juzgados, llega el niño entre los archiveros, llega el papá, llega la mamá y conviven ahí. Eso es un Poder Judicial que no tiene la sensibilidad y no entiende a la sociedad”.
—¿Cuánto estiman que podrían aumentar los juzgados familiares?
“Ahorita tenemos tres en Tijuana, tres en Mexicali, dos en Ensenada. Tenemos ocho jueces para atender todos los problemas familiares del Estado, y como yo digo, el 50 por ciento de la población ya acudió a un juzgado familiar, ya sea divorcio, pensión o convivencia. En Tecate, Rosarito y Ciudad Morelos tenemos juzgados mixtos, es decir, no nos ha alcanzado para hacer juzgados allá, pese a que tienen muchísimo trabajo”.
“Estos ocho juzgados podrían convertirse en tres o cuatro más, más el presupuesto que solicitamos para otros dos. Entre la creatividad y el apoyo del Congreso y el Ejecutivo, llegaríamos a un 75 por ciento más. Es inhumano. Hace unos años vinieron de las Naciones Unidas y nos dijeron que un juzgado familiar debería llevar entre 600 o 700 casos; aquí llevan tres mil. Es un tema muy sensible”.
“En los juzgados penales, solamente se implementó correctamente en Mexicali, se bajaron recursos federales e iniciaron con 18 jueces; se creó un presupuesto, infraestructura y capacitación, mientras que en Tijuana no se implementó así”.
“Tijuana estaba pensada para tener 32 jueces y aperturó con 12; tenemos cuatro salas nomás, eso alenta el sistema de justicia. Sabemos que ya desde hace cuatro años no hay temas tradicionales, pero se han ido cerrando. Eran 10, quedaron cinco; para el otro año estaríamos cerrando dos o tres juzgados”.
“Ahora, ¿qué logramos con eso? El sistema tradicional manejaba 10 juzgados hace siete años, con 20 personas cada uno, pero ahorita en el Nuevo Sistema hay en total 60 personas que manejan la justicia, hay 140 personas faltantes”.
“Requerimos jueces de control, dos de ejecución que atienden las peticiones de los internos; en Tecate tenemos uno, siendo que tenemos el Cereso del Estado”.
—¿Cuánto recurso requieren para operar los CECOFAM?
“Es importante analizar cómo queremos empezar: si queremos uno pequeño y que vayamos creciendo, requerimos cinco millones de pesos; si queremos un Cecofam con todo lo que requerimos, con director, enfermeros, psicólogos y demás, unos 15 millones (casi todo se iría en nómina). Ya hablé con legisladores y el Estado tiene inmuebles que nos podrían prestar”.
“Los centros de convivencia deben estar cerca de la ciudadanía, en escuelas; pudieran servir las escuelas en determinadas áreas, lo que necesitamos creatividad, para no invertir en un edificio de ocho o diez millones de pesos”.
—¿Y en temas de infraestructura?
“Tenemos tres edificios totalmente terminados, con puertas, ventanas y todo, pero vacíos. La Encantada, el Centro de Justicia de Tecate y Ensenada, con inversiones estimadas en los 500 mdp en total; por ello solicitamos activar esos proyectos, pero también a apoyar al Semefo”.
“En el presupuesto también contemplamos cuestiones urgentes como lo es la implementación de la justicia laboral que costará 200 mdp; las resoluciones públicas costarán 30 millones de pesos; el tribunal electrónico, ideal para los tiempos de pandemia, eso nos cuesta 30 millones; al mejoramiento de Semefo, 14. Son proyectos estratégicos que el Ejecutivo podrá elegir; la creación de una sala civil y penal en Zona Costa; también definimos un rubro para ello, el 75 por ciento de los casos de segunda instancia que se atienden en Mexicali provienen de Zona Costa”.
—¿Y qué hay con la propuesta de las salas unitarias?
“En la reforma presentada por el Congreso del Estado se contemplan las salas regionales y unitarias, sin embargo, ya se presentó una controversia. Ahora en ese tema, el 19 de diciembre entra en vigor la reforma, y si todo marcha de esa manera, pues ya nos sentaríamos a analizar el tema”.
“Me parecen excelentes las salas regionales, Chihuahua y el Estado de México los tienen, la cuestión de ser unitario no lo comparto porque a ti te resolvió un juez de primera instancia y para revisar el trabajo de un juez lo ideal es que se tengan tres criterios para definir la acción y sea mucho más seguro para él (justiciable). La Federación está eliminando los tribunales unitarios y los está volviendo colegiados”.
— Entonces ya se presentó la controversia…
“Ya se presentó. El acuerdo del Pleno se dio en octubre, se acordó la controversia y estábamos a la espera del resultado de la suspensión; hay que recordar que tenemos personas con su nombramiento vigente, vamos a esperar que la Corte decida. Sabemos muy bien que la suspensión no procede en casos de controversia contra leyes generales y hay antecedentes, pero vamos a esperar; no hay un plazo, pero esperemos que definan antes del 19 de diciembre algo de la suspensión”.
— Ha habido conflictos entre el gobernador y los diputados contra el Poder Judicial. ¿Cómo vas a enfrentar ese tema?
“Más que nada es una falta de comunicación, yo soy una persona que busca tener buena relación con todos. Buscaré una relación de respeto y cordialidad, y si ellos desean una cuestión del Poder Judicial, yo creo que ellos nos lo van a hacer saber”.
“La comunicación es la base de todo, tienen sus razones para dar algunas propuestas e iniciativas; aceptamos que somos perfectibles, pero nadie mejor para revisarnos que nosotros mismos que podemos corregir cualquier tema. Ya me reuní con el gobernador, platicamos muy bien. Él mostró plena disposición para el presupuesto, le gustó que nos acerquemos a la gente; tenemos un perfil similar de allegarnos a la ciudadanía”.
—¿Se van a incluir en las jornadas por la paz?
“Nosotros somos un poder totalmente imparcial; no damos un servicio, no somos salud o SIDUE, pero sí palpar la situación de la ciudadanía. Definitivamente hay un sector olvidado, un sector que no llega al abogado, que es el grueso que no ha sido atendido por el Poder Judicial; nos ha pasado, cuando alguien tiene una deuda menor a 50 mil pesos la da por perdida, eso no puede suceder. No hay nadie que te atienda, debes contratar un abogado y te va a cobrar para cobrarte un adeudo de 50 mil pesos; hay mucha gente que requiere ser escuchada, que fue víctima del comercio informal, del albañil, del comercio, del herrero, del mecánico”.
“Hace un par de años mutilaron la justicia alternativa, ahora requerimos reactivarlos y contratar el personal. Puede a abonar a la solución. La justicia alternativa la captó un nicho de ciudadanía que no alcanza al abogado, ahorita con pandemia han subido los números de justicia alternativa porque es más eficiente que seguir el camino dentro de un juzgado”.
“Primero hay que reforzarlo y después un sistema para desfogar un sistema, sobre todo en temas mercantiles o civiles”.
“Para contratar el personal requerido costaría unos cinco millones de pesos, y estoy seguro que los ayuntamientos nos podrían prestar un espacio en algunas de sus delegaciones”.
—¿Cómo distribuirán los dos mil 200 mdp?
“Aclaro que solicitamos lo mismo el año pasado. En 2019 nos autorizaron mil 39 millones, 2020 se nos autorizaron mil, pero con ampliaciones llegamos en mil 51; para este 2021 para funcionar requerimos sin aumentos y gastos elementales nos da mil 120 sin ninguna adquisición. Sin embargo, en los últimos tres años nos dan menos y luego nos dan ampliaciones, estamos a expensas. De ahí será importante que el Ejecutivo defina qué proyectos vamos a definir y ya se van formando los dos mil 200 millones”.
“Hay laudos de prima por jubilaciones, son 60 millones; laudos son 30 millones; el timbrado de nómina, tener nuestro propio registro de contribuyentes, son 167 millones. El Poder Judicial tiene mil 960 empleados, de los cuales 750 son de base y tenemos empleados de confianza de primer nivel que ganan menos de ocho mil pesos al mes; uno de cada cinco empleados gana eso”.
—¿Ya limaron asperezas dentro del Tribunal?
“Fuimos adversarios y ahora somos compañeros; o sea, no estoy casado con la “onda grupera”, aquí todos somos uno, somos el Tribunal y he tenido muy buena comunicación que no nos apoyó. Tuve siete compañeros con los que no coincidía, pero he tenido acercamiento con la mayoría de ellos y la verdad hay una buena recepción; eso ya se acabó, y hay que ver para adelante, porque algo muy importante es cuando tenemos esos grupos perdemos todos. Nadie gana con esos pleitos; todos queremos a la institución”.
“Yo creo que es difícil, sobre todo con el pretexto de que no es personal, pero ya depende de la personalidad y seguridad, y ahora sí que el desarrollo íntegro de cada individuo. A lo mejor hay gente que nunca olvida o que esté esperando, u otros que digan vamos para adelante”.
“Es muy difícil, sobre todo cuando te meten en cuestiones familiares, pero la mejor respuesta es seguir para adelante y el trabajo es lo que te va a decir, el día a día de demostrar que tu intención es trabajar”.
— Dices no coincidir con la “onda grupera” pero al final terminas electo perteneciendo a un grupo. ¿Cómo tomar eso?
“Es complicado, se necesita diálogo. Soy una persona que platica con los 16 compañeros que tengo, yo no tengo problemas con tocar la puerta de mis compañeros; el presidente es el representante de ellos, entonces, obviamente los 16 merecen mi atención y tengo la capacidad de comunicarme con los 16”.
— ¿Vásquez y Pérez Castañeda están bien?, ¿les pediste su voto?
“Sí, ya platiqué con ellos y están bien. Fue una contienda derecha, muy abierta; todavía platicamos esa mañana para ver cómo le hacemos y fue una contienda derecha. Derecho todo sale mejor”.
—¿Hubo intromisión externa en la designación del presidente del Tribunal (del fiscal o alguien más)?
“No de nuestra parte, desconozco si de mis colegas. Nadie operó. De hecho, ya habíamos platicado con este grupo de magistrados y es básicamente como les dije: no es que nos caigamos bien, pero todos queremos lo mismo. Cada quien tiene sus prioridades, igual Pérez Castañeda tenía sus ideas, e igual de buenas, pero sólo es definir cuál es la vertiente por la que te vas a ir”.
— Ante los últimos señalamientos (denuncia de hostigamiento sexual en su contra), ¿este será el momento en que el Tribunal impulse temas contra la violencia de género?
“Totalmente de acuerdo, fui titular de la unidad de Equidad de Género y algo que voy a trabajar por experiencia propia, cuando ocurra alguna situación anómala, las cuestiones de género”.
“Que quede muy claro: al día de hoy, pero hay más mujeres jueces que hombres, tenemos un número equilibrado en el Tribunal; a nivel de secretario hay cinco mujeres de cada hombre. Es un poder totalmente feminista, uno de los tres Poderes con más atención e igualdad a la mujer. En Tijuana hay dos jueces varones y el resto son mujeres”.
— Muchas gracias.
“Gracias a ustedes por el espacio”.