El Plan Nacional de Desarrollo 2019-2024,
que el Gobierno Federal encabezado por el
Presidente Andrés Manuel López Obrador
presentó el miércoles 1 de mayo a la Cámara
de Diputados del Congreso de la Unión, fue
elaborado con propuestas recabadas en
mesas de consulta a organizaciones civiles y
ciudadanos de todo el país
El documento incluye ejes de gobierno, política social, economía y la visión de la administración encabezada por el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, bajo los lemas de “Mandar obedeciendo”, “El mercado no sustituye al Estado” y “Por el bien de todos, primero los pobres”.
En el rubro de la seguridad, el Plan Nacional de Desarrollo (PND) 2019-2024 entregado por el Poder Ejecutivo federal al Congreso de la Unión, tiene como meta despenalizar el consumo de más tipos de drogas y reforzar la rehabilitación clínica de las adicciones.
Además, pretende concluir el sexenio con una reducción de 15.6 por ciento en la incidencia delictiva, respecto a los casos reportados en 2017. Aunado a que busca reducir los niveles de percepción de la inseguridad entre la población.
“En materia de estupefacientes, la estrategia prohibicionista es ya insostenible no solo por la violencia que ha generado, sino por sus malos resultados en materia de salud pública; en la mayoría de los países en los que ha sido aplicada, esa estrategia no se ha traducido en una reducción del consumo”, indica el documento..
“Peor aún, el modelo prohibicionista criminaliza de manera inevitable a los consumidores y reduce sus probabilidades de reinserción social y rehabilitación”.
De igual forma, el texto propone reorientar los recursos actualmente destinados al combate de las drogas a programas masivos de rehabilitación, nueva política que “se debe consultar con Estados Unidos y la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
“La única posibilidad real de reducir los niveles de consumo de drogas reside en levantar la prohibición de las que actualmente son ilícitas y reorientar los recursos actualmente destinados a combatir su trasiego y aplicarlos en programas masivos, pero personalizados, de reinserción y desintoxicación”, plantea el PND 2019-2024.
Además, tiene el propósito de reforzar el tratamiento clínico de las personas con adicciones y someterlas a procesos de desintoxicación.
“La guerra contra las drogas ha escalado el problema de salud pública que representan las sustancias actualmente prohibidas hasta convertirlo en una crisis de seguridad pública. “La alternativa es que el Estado renuncie a la pretensión de combatir las adicciones mediante la prohibición de las sustancias que las generan y se dedique a mantener bajo control las de quienes ya las padecen mediante un seguimiento clínico y el suministro de dosis con prescripción para, en un segundo paso, ofrecerles tratamientos de desintoxicación personalizados y bajo supervisión médica”, se lee en el documento.
Según el PND 2019-2024, el actual gobierno encabezado por López Obrador pretende cambiar las medidas de guerra por una política de paz, para lo cual propone, además, erradicar la corrupción y la impunidad; garantizar el empleo, la educación y la salud de la población; respetar los derechos humanos y redignificar las cárceles.
“El Gobierno de México se compromete a realizar acciones que permitan recuperar la seguridad pública en todo el territorio nacional, garantizando que las fuerzas de seguridad se conduzcan con estricto apego a los derechos humanos, igualdad y no discriminación”.
Otro de sus planeamientos, es que de 2012 a 2017 la incidencia delictiva pasó de 27 víctimas de algún delito por cada 100 personas, a 30 por cada 100. El aumento fue de 3.8 víctimas en términos absolutos de 2012 a 2017, durante todo el sexenio de Enrique Peña Nieto.
El documento detalla que en 2017 se cometieron 33.6 millones de delitos que afectaron a 25.4 millones de víctimas; esto es, 1.3 delitos por víctima durante ese año. En ese periodo, 36 por ciento de los hogares del país tuvieron por lo menos una víctima de delito.
En cuanto a homicidios, 2017 registró una tasa de 26 víctimas por cada 100 mil habitantes, cuando en 2016 era de 20 víctimas por cada 100 mil. Ante ello, el PND sugiere alcanzar en 2024 la meta de bajar la tasa de incidencia delictiva a 33 mil 219 los crímenes por cada 100 mil habitantes.
La línea base o punto de referencia de esta meta son los 39 mil 369 delitos registrados en 2017 por cada 100 mil habitantes, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía. Mientras que la reducción de la incidencia delictiva entre los crímenes de 2017 y la meta a 2024 sería de 15.6%
El PND también busca reducir los niveles de percepción ciudadana de la inseguridad, partiendo de la línea base de 79.4% de los ciudadanos mayores de 18 años de edad que en 2018 percibieron como insegura su entidad; el Gobierno Federal pretende bajar la cifra a 39.4% en 2024.
“México es un país enmarcado en una crisis de violencia e inseguridad que ha impactado gravemente la vida de la población y la economía del país. El homicidio es el crimen más representativo del precario estado de la seguridad pública en México. Muestra de ello es la tendencia en aumento desde 2016 a la fecha de la incidencia delictiva de todos los delitos de fuero común y del fuero federal”, expone el texto.
