De acuerdo con los directores de la dependencia estatal y la empresa española aún no se define el precio de venta.
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ENSENADA. El próximo 9 de julio comenzará a fluir por las líneas de conducción de la CESPE el agua de la planta desalinizadora, aseguraron este mediodía los directores de la Comisión Estatal del Agua y la empresa Aguas de Ensenada, Ricardo Cisneros y Moisés Pariente.
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Se tiene contemplado que el lunes 11 de junio el presidente Enrique Peña Nieto esté en Ensenada para atestiguar la terminación de la obra civil y el proceso de puesta en operación de dicha planta, que aportará 250 litros por segundo.
Moisés Pariente, director de Aguas de Ensenada, dijo que la obra ya está terminada, que está en periodos de prueba, de ajustes al proceso para que el agua cumpla con toda la norma, previo a mandarla al tanque El Gallo. La calidad del agua es similar a la del agua embotellada, dijo a ZETA en un recorrido por la planta.
Sobre el costo del metro cúbico, dijo que aún no se ha definido, pese a que hay un modelo financiero incorporado al contrato, hay cocientes de actualización, “pero ahora mismo si me pregunta no le podría dar el número exacto”, insistió Pariente.
En cuanto al retraso de la planta, dijo que estos proyectos son muy complejos e influyen muchos factores. “No es un tema de un retraso atribuible ni a nosotros ni a la CEA, lo que pasa que en el camino hay requerimientos de diferentes instituciones y pues hay que tomarlos en cuenta”, justificó.
El costo final de la obra será de 880.4 millones de pesos, 310 millones de pesos más que lo programado en un inicio, esto debido a requerimientos de diversas dependencias, dijo.
En ese sentido, el director de la CEA reiteró que no fueron causas atribuibles a la empresa. Hemos estado pendientes del proceso y haciendo los análisis pertinentes para que “proceda lo que tenga que proceder y lo que no pues hacer las deductivas correspondientes”, agregó durante el recorrido.
