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viernes, febrero 16, 2024
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Jorge Ortega en el Salón de la Poesía de la FIL

“Toda lectura de poesía entraña en el fondo un simulacro de la primera palabra, una reivindicación de la música verbal como una expansión de la conciencia, y, en efecto, una evocación a pequeña escala de la fraternidad humana”, expresó a ZETA el autor bajacaliforniano

El poeta y ensayista mexicalense Jorge Ortega leerá su obra en el ya tradicional Salón de la Poesía, como parte de las actividades de la 31 Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL), el lunes 27 de noviembre.


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El escritor bajacaliforniano (Mexicali, 1972) reconoció, en entrevista con ZETA, que “de acuerdo al historial de participantes, soy el primer poeta de origen bajacaliforniano convocado al Salón de la Poesía de la FIL de Guadalajara”, expresó.

“Consciente de la gran poesía que se compone ahora en el norte de México, espero que muy pronto, o en un futuro no lejano, puedan acudir más poetas de Baja California, nacidos o radicados ahí, que avalen este secreto a voces, el de que una buena porción de la mejor poesía mexicana se urde hoy por hoy en la cornisa del país”, complementó el ganador del Premio Internacional de Poesía Jaime Sabines 2010, por su obra “Devoción por la piedra”.

“Es un gusto y un honor poder sumarme a la nómina de autores de alta estatura poética y múltiples idiomas que han compartido sus poemas con el público mexicano, leyendo en propia voz. Creo que ahí radica el valor de esta experiencia, la de tender puentes de complicidad intelectual y emotiva con una audiencia desconocida en su mayoría, que gracias a las resonancias o las vibraciones de la presencia en un espacio íntimo, se vuelve un prójimo conocido, la extensión de uno mismo.


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“Toda lectura de poesía entraña en el fondo un simulacro de la primera palabra, una reivindicación de la música verbal como una expansión de la conciencia, y, en efecto, una evocación a pequeña escala de la fraternidad humana. Por lo demás, es una feliz coincidencia que mi participación coincida con el décimo aniversario del Salón de la Poesía, y más porque este 2017 he cumplido veinticinco años como autor, habiendo publicado ‘Crepitaciones de junio’, mi ‘opera prima’, en 1992”.

El escritor bajacaliforniano valoró su participación en el Salón de la Poesía, donde, durante nueve días, también incursionarán en la FIL de Guadalajara otros poetas que escriben en español, rumano, árabe, francés y maya, entre otras lenguas.

“El repertorio de este 2017 es muy variado en lo cultural y lingüístico. Habremos poetas de distintas generaciones y geografías, como también de otras realidades y latitudes continentales. Destacaría en particular la confluencia de los rumanos Mircea Cartarescu y Ana Blandiana; los españoles, Luis Antonio de Villena, Ada Salas, Antonio Rivero Taravillo y Olvido García Valdés; los sudamericanos, Leonardo Sanhueza y María Auxiliadora Álvarez; el iraquí Abdul Hadi Sadoun, radicado en Madrid; la quebequense Nicole Brossard; los mexicanos, Myriam Moscona y Luis Armenta Malpica, y por supuesto Briceida Cuevas, poeta maya bilingüe que junto a Natalia Toledo y Humberto Ak´abal, habrá protagonizado en el Salón de la Poesía, la concurrencia de las lenguas nativas. Un mosaico híbrido, como debe ser, y de indiscutible calidad. He leído casi a la totalidad y tengo francamente interés por escucharlos a todos”.

 

10 años del Salón de la Poesía

Cabe destacar que este año, el Salón de la Poesía celebra diez años de llevarse a cabo en el marco de la FIL de Guadalajara; aunque se trata de un espacio de cupo limitado al que se accede solo con registro previo, se está ante un recinto dedicado exclusivamente a la lectura de obra poética.

En un evento como la FIL de Guadalajara, donde converge el mundo editorial, ¿qué podrías destacar de que la lectura de poesía tenga un recinto especial como el Salón de la Poesía? Considerando además como un acontecimiento, la lectura de poesía, ese acto de leer y escuchar…

“Que la organización de la FIL de Guadalajara haya concebido desde hace una década un lugar específico para el oficio de la poesía, constituye para mí un gesto de respeto institucional hacia el género digno de reconocer. Es la mejor forma de rendir tributo a la madre de todas las escrituras literarias, la poesía, de cuya vertiente épica y dramática derivarán al curso de los siglos, la novela y el teatro. Ningún otro género tiene en la Feria un sitio de culto, ni la narrativa, ni el ensayo.

“De modo que es preciso celebrar que los lectores y oyentes gocen de un ámbito físico donde la poesía reivindique su naturaleza primigenia, erigiéndose a su manera, desde la humildad de la inmensa minoría que la procura y de la cual hablaba Juan Ramón Jiménez, como el ‘axis mundi’ del fenómeno del libro. Finalmente, la dinámica del Salón de la Poesía nos recuerda que la palabra escrita fue antes que nada palabra oída, sonido, por lo que también enaltece, de paso, el valor de la tradición oral en la divulgación de la literatura”, agregó Ortega.

En la entrevista con este Semanario, el autor de “Devoción por la piedra” (Coneculta, 2011; reedición: Mantis Editores, CETYS Universidad, 2016), también hizo un recorrido por los autores que han leído en el Salón de la Poesía, en su primera década:

“Creo que la nómina de los poetas invitados al Salón de la Poesía a lo largo de ese tiempo, bien articula un epítome heterogéneo en lo estético y lo discursivo de la mejor poesía que ha estado gestándose durante los últimos lustros en el dominio hispano y la escena internacional, ya que se han presentado ahí poetas que han constatado a la postre una obra ineludible, y me refiero a José Emilio Pacheco, Alí Chumacero, Dana Gioia, José Luis Peixoto, Gioconda Belli, Rafael Cadenas, David Huerta, Jorge Esquinca, Eduardo Lizalde, Tomás Segovia, Antonio Colinas, Dolores Castro, Maram al-Masri, Claribel Alegría, Juan Gelman, Óscar Hahn, Elsa Cross, Edward Hirsch, Hamutal Bar Yosef, Raúl Zurita, Luis García Montero, Pura López Colomé, Jorge Humberto Chávez, Forrest Gander, Yves Bonnefoy, Rodolfo Hinostroza, María Negroni, Diana Bellessi, Ernesto Cardenal, Eduardo Chirinos, Antonio Gamoneda, Minerva Margarita Villarreal, Dinu Flamand, Piedad Bonnett y Jorge Fernández Granados, entre otros”.

Ante semejante lista de poetas del mundo que han desfilado por el Salón de la Poesía, Jorge Ortega también reconoció:

“Será una distinción incorporarse a esa vasta y valiosa familia compuesta de grandes o promisorios autores que he leído con fervor y que han contribuido a mi formación artística y lectora, y desde luego humana y espiritual, algunos de los cuales me privilegian con su amistad”.

El doctor en Filología Hispánica por la Universidad Autónoma de Barcelona, compartió sus planes editoriales para 2018, tras su participación en la FIL de Guadalajara:

“Cierro 2017 viajando, tal como lo inicié, llevando la buena nueva de la poesía hasta donde me lo permitan la necesaria soledad del escritor, el trabajo académico y la salud. Para 2018 tengo proyectada una antología de poemas con la que deseo conmemorar mis veinticinco años de andadura como poeta; igualmente, estimo sacar a la luz un libro de crítica: la reflexión sobre poesía, que junto a la creación en sí, integra otra de mis irresistibles pasiones. No basta escribir y leer poesía, hay que siempre pensarla, comentarla, discutirla”.

Finalmente, Jorge Ortega leerá el lunes 27 de noviembre, de 17:30 a 18:20 horas, en el Salón de la Poesía, ubicado en la Planta Alta de la Expo Guadalajara.

Autor(a)

Redacción Zeta
Redacción Zeta
Redacción de www.zetatijuana.com
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