Por denunciar durante más de un año la falta de medicamentos, la escasez de personal y el mal estado de las instalaciones y equipo de la Clínica del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Gobierno y los Municipios del Estado de Baja California (ISSSTECALI), en Playas de Rosarito, el Dr. José Luis Gómez Quezada fue transferido por la institución a Urgencias en la Clínica El Mirador, en Tijuana. Sostuvo el medico en conferencia de prensa.
Señaló que si bien, nunca se le hizo caso a sus quejas, probablemente fue su denuncia de otorgación de plazas sindicales, de manera indebida, la que provocó que se tomara la decisión de transferirlo a otro municipio, situación de la cual informó en el reportaje “Personal de ISSSTECALI en Rosarito señala irregularidades” (ZETA 2202, 10 al 16 de junio de 2016).
La transferencia de Gómez, hace seis semanas, detonó en la creación del Comité Ciudadano, mismo que reúne a trabajadores del sector salud, en sus diferentes instituciones, así como a derechohabientes en Playas de Rosarito, para pugnar por mejores condiciones para las clínicas públicas del municipio, al que las autoridades estatales siguen considerando como una delegación de Tijuana.
“En el pleito legal, uno se siente solo con poco respaldo sindical; por la vía legal atropellan todos tus derechos y quieren que todo lo hagas por la vía legal, entonces tienes que formar un frente ciudadano para hacer presión social y revertir las cosas”, declaró.
“Tenía ya más o menos un año y medio señalando las irregularidades que se presentan aquí en ISSSTECALI Rosarito y no había eco, no nos hacían caso, en grado de que, en vez de mejorar las cosas, optan por moverme, esa es la manera más absurda de componer las cosas. Me mueven a Urgencias Mirador, están acostumbrados a resolver las cosas de esa manera, en vez de corregir lo que uno señala”, agregó.
De las acciones legales emprendidas por esta transferencia, dijo que presentó la queja correspondiente ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), así como ante el Sindicato de Burócratas, donde realizó una declaración de hechos, que ya debe estar en manos del Departamento Jurídico de ISSSTECALI.
Por su parte, ISSSTECALI respondió a ZETA que la transferencia de Gómez no se trata de un correctivo, sino que se ejecutó por las necesidades de servicio que tenía la Clínica El Mirador. Se afirmó que esta situación no violentó ningún derecho laboral del médico al establecerse estas transferencias en el Contrato Colectivo de Trabajo correspondiente.
