La contención de la violencia en Baja California costó tres veces más de lo invertido en desarrollo social, educación y salud, por lo menos en el año 2012. A pesar de ello, la entidad ocupa uno de los cinco estados con menos paz en el país. Lo anterior, de acuerdo al Índice de Paz México (IPM) 2013, emitido por el Instituto Economía y Paz (IEP), una organización internacional de carácter privado que interviene en la República Mexicana. Según el informe, las variables de delitos con violencia, financiamiento de fuerzas policiales, sistema judicial, seguridad privada, gasto militar, miedo y pólizas de seguro, costaron a la entidad unos 79 mil 800 millones de pesos. A diferencia de Querétaro que en una escala per cápita es el segundo estado con mayores niveles de paz y al mismo tiempo de las siete entidades a las cuales, menos les cuesta la violencia, Baja California ocupa el lugar 27 y 12, respectivamente. Patricia de Obeso, representante en México del IEP, destacó entre las conclusiones para Baja California que se requieren esfuerzos por disminuir el tráfico de armas de fuego, así como reforzar el combate al crimen organizado en sus diferentes modalidades: secuestro, extorsión y delitos contra la salud. Explicó que cuando los altos costos de la confrontación de la violencia no reflejan un aumento en los índices de paz, lo necesario es evaluar si el recurso público se ha destinado de forma correcta. En el tema de la prevención del delito, “un llamado muy concreto es cómo se eligieron las colonias y municipios en los que hay que trabajar. Si observamos algunas de las colonias que se escogieron en algunos municipios, o vemos que no son los municipios que tienen las tasas más altas e homicidios o cierto delito (en los que se invirtió)”. La representante de IEP, habló sobre la necesidad de que el gobierno elabore políticas públicas con las comunidades ya que “muchas veces no son lo que necesita, ese diseño de las políticas públicas junto con la ciudadanía se sigue necesitando mucho”. En el tema de impunidad, dijo que según el documento elaborado por el IEP, la entidad registra un porcentaje del 50 por ciento, lo que sitúa por debajo de la media nacional. No obstante, el presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Juan Manuel Hernández Niebla, no coincidió con el dato. Aseguró que de acuerdo al número de delitos no denunciados y a la eficacia en la procuración de justicia, el porcentaje se eleva al 95 por ciento. Otras cifras discutidas en la presentación, corresponden al número de extorsiones y crímenes vinculados a las drogas, mismas que crecieron por encima de la media nacional en un 113 y 200 por ciento. Dentro de lo positivo que se encontró en la entidad, se señaló la coordinación entre las instituciones de seguridad, emulando un mando policial único. Así como la depuración y el aumento salarial a los elementos de seguridad pública. Finalmente, Mara Torres Pinedo, representante del Instituto Nacional para la Democracia, aseguró que el Índice de la Paz plantea con sus cifras la necesidad de aplicar nuevos criterios en la ejecución de políticas públicas en materia de seguridad y de combate a la corrupción.
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