Van dos borrachos por la nieve, uno ve a un perro San Bernardo con su barrilito de whisky, y le dice al otro:
“¡Mira, por ahí viene el mejor amigo del hombre!”.
A lo que el otro contesta:
“Sí, ¿y viene con un perro?”.
Autor: Rescatista en un bar.
Diagnóstico equivocado
En una consulta médica, un hombre de avanzada edad escucha a su doctor darle su diagnóstico:
“El dolor de su pierna derecha se produce por su avanzada edad”.
No muy convencido, el hombre refuta:
“No lo creo, porque la otra pierna ¡tiene la misma edad y no me duele!”.
Autor: Un geriatra.
Cómo consiguió Adán a Eva
No hay nada como una buena historia bíblica para alegrar el día. Adán andaba triste y meditabundo por el Jardín del Edén, sintiéndose muy solito… así que Dios le preguntó qué pasaba con él.
Adán le dijo que no tenía a nadie con quién hablar, que se sentía solo e incompleto.
Entonces Dios se propuso darle compañía a Adán y así se lo hizo saber; le dijo que sería una mujer:
“Esta preciosa chica te conseguirá comida y cocinará para ti. Y cuando inventes la ropa, lavará y planchará para ti. Ella siempre estará de acuerdo y acatará cualquier decisión que tomes y no te refunfuñará. Y siempre será la primera en admitir sus errores cuando estés disgustado con ella. Cuando te vayas de parranda con tus amigos no te reprochará nada. ¡Ella te adorará y reverenciará! Cuidará de tus hijos y nunca te pedirá que te levantes en mitad de la noche para cuidarles. Nunca tendrá un dolor de cabeza y satisfará tus deseos de cualquier tipo”.
Entonces Adán preguntó a Dios:
— ¿Y cómo obtendré una así?
“Te costará un TEST….”.
¡¡¡¿Whaaat?!!!
Adán vio hacia abajo (andaba desnudo), tragó saliva y le preguntó:
“¿Y qué me das por una costilla?”
Y ya se saben ustedes, amables lectores, el resto de la historia… ¡Y todo por regatear!
Autor: Anónimo del catecismo.
Caperucita vs la Suprema Corte
Derivado de que ahora todo tribunal es exageradamente garantista, en mucho a favor del delincuente, aquí les va este fallo de la Corte. Caperucita Roja vs la Suprema Corte.
Sentencia del caso de Caperucita Roja y el Lobo desde la perspectiva de la Suprema Corte de Justicia Mexicana:
Visto y considerando los acontecimientos ocurridos y por todos conocidos fallamos:
Por todo lo antes dicho, se absuelve al señor Lobo y se dispone además:
Asimismo, se aclara en el presente fallo que este proceso no afecta el buen nombre, la reputación ni el honor del respetable señor Lobo. Publíquese, archívese y téngase por firme el presente fallo.
Atentamente: Suprema Corte de Justicia de la Nación.
Autor: El abogado del inocente Lobo.