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sábado, febrero 24, 2024
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Esos polis

Un policía a un conductor:

¿No ha visto el alto?


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“Sí, pero es que no creo todo lo que leo”.

 

***


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Se encuentra un niño en un parque y ve un letrero que dice: “Por favor no pisar el pasto, ni subirse a los árboles”.
En eso pasa un policía y le cae una hoja de un árbol, voltea hacia arriba y cuestiona al niño: “¡Oye tú! ¿Qué no sabes leer?”.
El niño contesta que no, por lo que el policía le pide que baje del árbol. Cuando el niño baja el policía pregunta: “¿Y tú quién eres?”.
Y el niño contesta:
“¿No se acuerda? ¡Yo soy el que estaba arriba!”.

 

***

 

En cierta ocasión estaba un policía en su motocicleta, listo para corretear a cualquiera que quisiera violar los límites de velocidad.
En ese instante pasa una mancha roja a toda velocidad, el agente de seguridad se prepara para ejecutar la persecución, acelera la motocicleta y está por alcanzar el vehículo, cuando éste entra a un callejón sin salida y se estrella con una pared.
El policía baja de su moto y se dispone a hacer la inspección.
“A ver, no tiene placas de identificación, ni siquiera parabrisas, ni vidrios, no tiene bolsas de aire y no logro ubicar el volante. Bueno muchacho, y tú, ¿de dónde sacaste este vehículo?”.
Adolorido, el muchacho responde:
“¡De la montaña rusa!”.

 

***

 

Un señor va por la autopista a 120 kilómetros por hora y en carril contrario. Un policía lo ve y lo detiene:

Lo voy a detener.

“¿Por qué?”.

Va muy rápido.

“En Alemania la velocidad de los carros es ilimitada”.

Igual lo multaré.

“¿Por qué?”.

Va en el carril contrario.

“En Alemania se puede manejar por donde se quiera”.

Eh… Igual lo multaré.

“¿Por qué?”.

Lleva las luces apagadas.
“Pero si es de día…”.
Acá sí, pero en Alemania no.

 

***

 

En una persecución policiaca, el agente  va a gran velocidad en su moto y el malhechor en un auto de carreras. El policía no lo alcanza y acelera más, en una esquina el malhechor dobla y cuando el policía intenta lo mismo se descontrola y cae de la motora, y se pela toda la piel de la cara, brazos, piernas, espalda. Hay un borracho cerca de la caída del policía, se levanta, y actuando como árbitro de beisbol grita:

“¡Saaaaaaaaafe!”.
El policía se levanta y da tremenda paliza al borracho, quien quejándose de los golpes le dice:

“¡Y eso que te grité safe, si te grito out me matas!”.

 

***

 

Un conductor borracho es detenido por un policía.

¡A ver! ¿Dónde está su licencia de conducir?

“No me digan que me la han perdido… ¡Hace apenas dos días se las di!”.

 

***

 

Va un señor a la comandancia y le dice al jefe:
Señor agente, vengo a denunciar la desaparición de mi esposa.

“¡Muy bien, señor!”.
Dos auxiliares toman todos los datos de la mujer y luego le dicen:
“¿Tiene alguna foto para ponerla aquí?”.

Sí, señor, aquí tiene una.
El agente la ve  y pregunta:

“¿De verdad quiere que la encontremos?”.

Autor: Anónimo del Consejo Ciudadano de Seguridad Pública.

 

Creyente

Mi mujer me hizo creyente.
“¿Y eso?”.

Yo no creía en el infierno, ¡hasta que me casé con ella!

Autor: Marido convertido.

 

Pecadora

Antes de tener relaciones, una joven reza:
“Virgen María, tú que concebiste sin pecar, haz que yo peque sin concebir”.

Autor: Joven de vacaciones.

 

Fea en la procesión

Una mujer muy, muy fea, cuyo marido siempre se está metiendo con ella, tiene un problema bastante serio. Pero un día se decide a salir a la calle; es más, quiere ir a la procesión de Semana Santa.

Oye, me voy a ver la procesión.

“¿Tú? ¿Con lo fea que eres? ¡Pero si va a haber un montón de gente!”.

No me importa que me vean, tengo derecho a ir.

“No, si es que eres tan fea que vas a asustar a todos”.
Total, que la mujer se va, y al volver le dice al marido toda contenta:
¡Me han confundido con la virgen!
“¿A ti? ¿Con lo fea que eres? ¡Eso es imposible!”.

¡Que sí, que sí! Uno de los que llevaban el paso ha dicho al verme: “¡La madre de Dios!”.

Autor: Anónimo del catecismo.

 

Dormilón

En el centro de Ohio la calma se vio interrumpida por unos balazos que provenían del interior de una vivienda donde un hombre enfrentó a la Policía durante cuatro horas, hasta que de pronto dejó de disparar.

Temiendo un suicido, los agentes aplicaron el protocolo debido, rodearon la casa y con estrategia entraron al domicilio para encontrar al individuo de 75 años de edad ¡EN ZERIO! dormido en una cama.

Al momento se desconocen las razones por las cuales el abuelito dormilón desató esta trifulca, pero el arresto no se lo quita nadie.

 

Autor(a)

Redacción Zeta
Redacción Zeta
Redacción de www.zetatijuana.com
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