Todos los martes por la tarde hay clases gratuitas de música para los niños migrantes, refugiados y colonos de la zona norte de la ciudad de Tijuana en el centro de atención Salesiano, frente al panteón uno.
Históricamente, las leyes alrededor del mundo no protegieron a los grupos de atención prioritaria de la violencia; así, en muchos lugares estaba permitido de manera implícita que los maestros castigaran físicamente a sus estudiantes.
Amal, la marioneta de una niña siria en busca de su madre, llegó hoy a Tijuana, visitando la garita de El Chaparral, la Casa de la Cultura de Playas de Tijuana y el Muro Fronterizo.
El protocolo establece que no se podrá negar el acceso a la educación por falta de documentos o antecedentes académicos y que los niños migrantes pueden matricularse en cualquier momento del ciclo escolar
Desplazamiento, atraso escolar, depresión, insomnio y pesadillas, son sólo algunos de los efectos colaterales que viven los huérfanos de la violencia en México, víctimas secundarias, invisibles para la sociedad, resultantes de homicidios,