En efecto, por lo menos en los canales que veo se nos inunda con una cantidad de anuncios largu铆simos que francamente atentan contra el derecho que, como ciudadano de esta naci贸n, tengo de recibir informaci贸n y entretenimiento sin tener que soportar el exagerado bombardeo de anuncios que llenan la mayor parte del tiempo las televisoras.