Adela Navarro Bello
Directora General del
prestigiado Semanario ZETA en Baja California.
A quien corresponda:
Soy el de nombre Jonathan Pérez Arias, comerciante de la ciudad de Mexicali,...
Recuerdo allá por 1970-1980, aquí en Tijuana, la antigua y urbana, que proliferaban los cines sobre ruedas bajo carpas de nylon y plástico. Se ponían en varios predios en la vieja Tijuana: ponían sus cinitos e iba el público. No había riesgo de violencia.
Será que ese buen día, los hombres dormían en aquel campamento urdidos en sus tiendas del lado derecho, si es que podemos definir un lado, porque en un lugar tan inhóspito ¿quién puede determinar los lados?; porque del lado izquierdo no había, no había nada sin los hombres.
La desidia es la cura de ello, el tiempo no aprovechado hizo que varios no tuvieran a tiempo lo requerido para la estancia en el país. ¿Oportunidad? ¿Leyes tardías? El no hablar inglés, el estar soltero o soltera, son causas que hacen que no pudieran residir miles y miles de ilegales en Estados Unidos.
Ya es el día del padre
mi pluma quiere escribir,
unos versos que le alaben
pues por él pude existir.
Cada día muy temprano
se ponía a trabajar,
en la...
Este engaño mortal es de proporciones tan monumentales que cuesta asimilar la horrorosa realidad que presenta. Intentar calificar estos crímenes como “golpes defensivos” es una ofensa a la razón.
Adela Navarro Bello, periodista tijuanense egresada de la UABC, Campus Tijuana, se graduó la cimarrona exitosa; estudió periodismo, y en su empuje y decisión por esa carrera, fue su gusto por las letras y su interés por esa carrera profesional que la llevaron a sus maestros Héctor Félix Miranda y José de Jesús Blancornelas.
Habla de resentimiento,
habla de puro dolor,
habla porque le ha dolido
su maldito corazón.
El ego se siente herido,
le duele hasta el calzón
pues la visa le han...
Recuerdo allá por 1970-1980, aquí en Tijuana, la antigua y urbana, que proliferaban los cines sobre ruedas bajo carpas de nylon y plástico. Se ponían en varios predios en la vieja Tijuana: ponían sus cinitos e iba el público. No había riesgo de violencia.
Mientras la gente esperaba fuera del centro de ayuda en las primeras horas de la mañana, siguiendo las instrucciones de los empleados estadounidenses, testigos describieron un dron cuadricóptero israelí sobrevolando la zona y ordenándoles por altavoz que entraran al área cercada a las 6:00 a.m.