El 13 de octubre, Mario Escobedo Carignan, todavía secretario de Economía Sustentable y Turismo, el primero -y el último, de hecho- en ostentar tal cargo, dado que en la próxima administración estatal se dividirá esa secretaría, festejó su cumpleaños en su casa en Tijuana.
El ingeniero y gobernador por Baja California, Jaime Bonilla Valdez, así como su secretario y doctor honoris causa, Amador Rodríguez Lozano, tienen -por 16 días más- el poder y las herramientas para generar cambios, pero hasta el último momento, siguen intentando torcer la Ley en lugar de aplicarla.
La integridad es un pilar de la fiscalización superior: vigila la correcta gestión de los asuntos públicos, de acuerdo con el interés general y procura el bienestar de la población. Por ello, es un elemento indispensable para el correcto funcionamiento de la democracia, ya que ayuda a preservar la credibilidad de las instituciones y la confianza ciudadana hacia ellas.
La carencia de medicamentos e insumos, negligencia que ha provocado que “muchos enfermos sumamente graves recaigan”, es una historia que sigue repitiéndose en Baja California a largo de la pandemia del virus SARS-CoV-2. Tuvo una crisis a finales de julio de 2020, y se repite en 2021.
Mientras que por un lado, el gobierno de Jaime Bonilla Valdez acusa de tráfico de influencias al hijo de la ex procuradora Perla del Socorro Ibarra Leyva, Ricardo Padilla Ibarra, por beneficiarse del poder que tiene su madre, quien, a punto del retiro todavía se desempeña como magistrada del Tribunal Superior de Justicia del Estado, gobiernos municipales morenistas benefician a su hermana con cargos públicos.
Hace unos días, después de haber sido nombrado como futuro secretario general de Gobierno de Baja California por la próxima mandataria Marina del Pilar Ávila Olmeda, Catalino Zavala Márquez se apersonó en las instalaciones de la Fiscalía General del Estado y sostuvo reunión con su titular, Guillermo Ruiz Hernández.
Agentes siguen detenidos por sospecha de secuestro. Cinco fueron acusados de plagiar a un empresario, tres siguen en investigación. El fiscal general del Estado, Guillermo Ruiz Hernández, realiza maniobras no aceptadas por la gobernadora electa; va para afuera
Mientras Miguel Ángel Badiola sigue cosechando impunidad para no ser investigado por el fraude que le acusan empresarios tijuanenses de haber cometido en su contra -junto a su secretaria-, utilizando como “anzuelo comercial” un concierto de Los Tucanes de Tijuana organizado por la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados, al apoyar en relaciones públicas al fiscal general del Estado, Guillermo Ruiz, y entregar reconocimiento al gobernador Jaime Bonilla por parte de la misma Canirac, su esposa, Irma Contreras, mejor conocida como Irma Badiola, intentó ir más allá.
El Valle de Guadalupe, cuna del vino bajacaliforniano, se encuentra en una crisis entre el alza en la incidencia delictiva, la escasez de agua, la llegada de nuevos proyectos gastro- turísticos y las irregularidades en permisos que se otorgan para operar en la zona