De nueva cuenta llegó otro aniversario de la matanza allá en Acteal, Chiapaz, que la escribo con “z” porque no sabemos cuándo llegará la paz a ese estado, con tantas tragedias.
El Plan de Previsión Social y/o Plan de Beneficios, está a punto de desaparecer debido al contubernio existente entre los líderes sindicales de la Secc.37 del SNTE y el Gobierno del Estado.
Poemas a ciudades y amores, peticiones, reclamos a la sociedad, anuncios, promociones de eventos, felicitaciones, pésames, derechos de réplica y más ha sido publicado en este medio periodístico, incluyendo a los casi extintos faxes, como uno que se recibiera en 2019, proveniente de Tamaulipas, y que luego formaría parte del archivo de “Huellaz”
No nos cabe la menor duda que hasta muchos “comunistas” (es decir, socialdemócratas y revisionistas) mexicanos celebraran, unos abiertamente y otros a la chita callando, la inauguración del nuevo y pomposo aeropuerto civil-militar.
Mi esposo llegó al Hospital Velmar con fracturas en el cráneo, sangrado en el oído izquierdo y contusiones y fracturas en toda la parte izquierda de su cuerpo. Llegó a eso de las 13:30 horas. Hubo retrasos para conseguir un neurocirujano, llevarlo a que le sacaran imágenes, tomar decisiones con respecto a la cirugía, ponerle sedantes y entubarlo.
No hará falta estar pendiente de su regreso a la Cámara Alta, pues excesivamente protagónico como es, seguramente continuará con sus arraigados hábitos, como el de “saludar con sombrero ajeno”.
Ese periodo es lo que duró el Sr. Vicente Fernández hospitalizado. Larga agonía que le puso la sabia vida, sobre todo por los excesos que vivió e hizo en esos 81 años de existencia.