Impunes, sin justicia, es como permanecen los casos de Dolores Hernández y Ricardo Villa, ambos atropellados en Tijuana en septiembre de 2024 y en julio de 2025, respectivamente, pues a la fecha, los responsables permanecen prófugos tras haber sido liberados para llevar su proceso en libertad.
El 22 de septiembre de 2024, mientras la señora Dolores Hernández, subía a su vehículo Honda Civic, color azul, estacionado entre la calle Dos y la calle Venecia, en la colonia Villa Fontana, fue atropellada por Miguel Ángel Pérez Xicoténcatl, quien conducía una camioneta Subaru a exceso de velocidad.
El impacto arrojó a la mujer a una distancia de seis metros, posteriormente, Miguel Ángel trató de maniobrar su vehículo, pero acabó chocando contra una camioneta Cherokee y se volcó de costado, cayendo sobre Dolores, provocándole la muerte al instante.
Según testigos, el responsable intentó darse a la fuga, pero fue detenido por los locatarios y posteriormente entregado a agentes municipales. Miguel Ángel fue imputado por su presunta responsabilidad en el homicidio culposo de Dolores, pero en la audiencia realizada el 25 de septiembre, por inconsistencias en la carpeta de investigación y en los reportes policiales, se declaró ilegal su detención y se determinó que llevaría su proceso en libertad, tras lo cual se dio a la fuga, pues para la audiencia del 25 de octubre ya no se presentó.
Un caso similar, es el del fotógrafo de burro cebra de la Avenida Revolución, Ricardo Villa, quien el 6 de julio, alrededor de las 11:20 horas, fue arrollado por un conductor de taxi de la ruta Obrera-Centro, que circulaba sobre la calle Tercera en la Zona Centro.
Supuestamente, el taxista identificado como Miguel Ángel Morquecho Martínez, conducía bajo los influjos del alcohol, lo que lo hizo perder el control de la unidad, impactándose contra un puesto ambulante de accesorios y la carreta de Ricardo Villa, arrojándolo hacia el interior de una farmacia.
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Ricardo fue trasladado a un hospital por sus múltiples heridas, pero tras seis días internado perdió la vida. Morquecho Martínez, fue detenido tras atropellar al fotógrafo y el 8 de julio fue vinculado a proceso, imponiéndole la medida cautelar de presentación periódica semanal con garantía económica de tres mil pesos por los delitos de Lesiones por Culpa, Daño a Propiedad Ajena por Culpa y Manejar en estado de Ebriedad. Pero el imputado incumplió la medida cautelar y no se presentó.
A la fecha, en ambos casos los presuntos responsables permanecen prófugos de la justicia, sin que haya pistas de su paradero.
Casos pendientes
Otros casos pendientes de justicia son los de la señora Silvia Aurora Yáñez, de 67 años y la menor de 5 años, Silvia López; así como el de Edgar Zuriel Hernández Luna, de 30 años, ambos registrados este año, el primero el 12 de agosto en la colonia Planicie y el último el 7 de septiembre en la Zona Centro. Actualmente, los presuntos responsables permanecen en prisión preventiva, pero aún no se les emite sentencia.
El 12 de agosto a las 18:57 horas, presuntamente Carla Alejandra Muñoz Torres, conducía un vehículo Chevrolet Silverado 2004, color blanco, placas BD3967A, cuando al transitar por la calle Catemaco perdió el control impactándose contra la señora Silvia Aurora Yáñez, la nuera de ésta, Alejandra López, y sus nietos Silvia y Obed, de 5 años y 7 años, respectivamente.
Mientras que Alejandra López y su hijo Obed, no tuvieron lesiones graves, la señora Silvia quedó sin vida en el lugar y la pequeña Silvia fue declarada con muerte cerebral, por lo que sus padres decidieron donar sus órganos.
Por su parte, tras atropellar a la familia, Carla Muñoz, intentó darse a la fuga con ayuda de un hombre, pero gracias a la ayuda de los vecinos no lo logró y fue detenida.
En el caso de Edgar Zuriel, éste fue arrollado a las 05:33 horas del 7 de septiembre por Héctor Eduardo Cervantes Montes, quien conducía un vehículo Honda, línea Pilot, modelo 2009, en color gris, con el que lo atropelló y arrastró al intentar huir de la policía municipal.
El reporte preliminar indica que, mientras Héctor Eduardo circulaba sobre la rampa Independencia, en la colonia del mismo nombre, se impactó contra la parte posterior izquierda de una patrulla, al girar en reversa. Tras el incidente el agente a bordo de la unidad le indicó que se detuviera, pero el imputado se dio a la fuga rumbo a la calle Miguel Hidalgo, iniciando una persecución.
Paralelamente, Edgar Zuriel, quien manejaba una motocicleta sobre el bulevar Agua Caliente, intentó descender del vehículo al llegar a la intersección con Avenida Francisco I. Madero, pero cayó sobre el carril de circulación, fue ahí que Héctor lo atropelló, arrastrándolo 50 metros; a pesar de ello no se detuvo y emprendió la huida hacia la Zona Centro.
Tras detener su marcha en la intersección con calle Juan Sarabia, Héctor fue detenido y más tarde vinculado a proceso por homicidio simple, permaneciendo en prisión preventiva.
Tanto Carla Muñoz Torres como Héctor Eduardo Cervantes conducían bajo los influjos del alcohol, y en el caso del último, también de metanfetamina y cocaína. Por ello, familiares de sus víctimas exigen que los casos sean clasificados como dolo eventual, lo que el fiscal regional de Tijuana, Rubén Alfredo Maximiliano Ramos Jiménez, aseguró solicitarán en las próximas audiencias, aunque la decisión final dependerá de los jueces a cargo.







