El Ayuntamiento de Mexicali formalizó sus intenciones de arrancar un proceso de empadronamiento, regularización y revisión de los más de mil 890 permisos de alcoholes reconocidos en la Capital bajacaliforniana, bajo el argumento de que se tiene un desorden histórico en la tenencia de este tipo de permisos que facilitan la venta de bebidas embriagantes.
La propuesta que se concretó en un punto de acuerdo publicado en el Periódico Oficial del Estado (POF) el pasado 7 de febrero del 2025 le otorga facultades al secretario del Ayuntamiento. Rodrigo Llantada Ávila, impulsor del tema para que arranque el “Programa de identificación, empadronamiento y regulación de permisos para la venta de bebidas alcohólicas en envase cerrado”, que tendrá como objetivo hacer una revisión de todos los permisos, exceptuando bares, antros, restaurantes y hoteles. Es decir, la prioridad será negocios como supermercados, abarrotes, licorerías, entre otros.
Aunque la alcaldesa de Mexicali, Norma Alicia Bustamante Martínez, negó en una entrevista realizada el pasado lunes 3 de marzo, que la intención sea el otorgamiento de nuevos permisos de alcoholes; el mismo punto de acuerdo refiere que se podrán recibir solicitudes para ampliar permisos hasta en un 15 por ciento del padrón vigente.
Cabe mencionar que de los mil 893 permisos vigentes que identifica el Ayuntamiento de Mexicali, un total de 522 son de envase abierto (bares, antros, restaurantes), lo que significa que mil 371 son de envase cerrado, por lo que el 15 por ciento de esta cifra representa un total de 205 permisos de alcoholes que el punto de acuerdo permitiría como cifra máxima para otorgarlos.
Para el secretario Llantada Ávila, hay que perder el miedo a analizar este tema con seriedad y no sólo por la inconformidad mediática o de opinión pública, por lo que a su juicio no tendría nada de malo abrir la oportunidad para que más personas tuvieran acceso a permisos de alcohol.
Aunque el funcionario niega que se trate de un acto meramente recaudatorio, la realidad es que los ingresos por nuevos permisos de alcoholes representarían un beneficio millonario para la administración, a lo que se le sumarían otras acciones como el pago de recibo de no adeudo para otorgar licencias de construcción y el amague del congelamiento de cuentas a quienes no desean pagar el predial, entre otros elementos.
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Por su parte, Gonzalo Moreno, activista de la Célula de Búsqueda de Baja California, se mostró inconforme con la posibilidad de aumentar la venta de permisos de alcoholes, pues considera que es la antesala para abrir la posibilidad futura de otorgar nuevos permisos a bares y antros, cuando estos centros nocturnos carecen de regulación y de seguridad, recordando que su hijo, Kevin Moreno, y otras nueve personas más, fueron desaparecidas de centros nocturnos ubicados en la Zona Dorada de Mexicali.
PROLIFERA EL MERCADO NEGRO
Según la información oficial, desde el año 2014 no se han otorgado permisos de alcohol en Mexicali, lo que, según el secretario del Ayuntamiento, ha provocado la proliferación de un mercado negro donde los propietarios de permisos venden o rentan sus licencias a negocios de diversos giros, lo que ocasiona que el pago de este permiso encarezca los productos ofertados. Es decir, pagar una renta del permiso aumenta los precios en este tipo de establecimientos, sobre todo los pequeños, pues empresas cerveceras o negocios nacionales tienen la capacidad para adquirir sus propios permisos.
Y es que un permiso de alcohol para venta de envase cerrado cuesta poco más de 1.5 millones de pesos, mientras que los de envase abierto alcanzan los 1.8 millones, dependiendo el corte del negocio; pues no es lo mismo una tienda de abarrotes que un supermercado; o un billar a un café cantante.
Pese al alto monto de estos, las revalidaciones son minúsculas, pues según la Ley de Ingresos 2025, el refrendo del permiso para una tienda de abarrotes (el más barato) alcanza los tres mil 933 pesos; los mercados 20 mil 528 pesos; los supermercados 31 mil 647 pesos.

A pregunta directa sobre si se cuenta con algún diagnóstico de impacto social o un estudio que determine esta situación o la distribución de los permisos de alcohol operando en la ciudad, el funcionario aseveró que no, pero “la ciudad está para promover una economía de mercado”, por lo que consideró que si hay empresas o personas que cumplan con los requisitos, el Ayuntamiento no debería negar otorgar el permiso.
Dentro de las obligaciones de los propietarios de permisos se encuentra el contar con permiso de uso de suelo, no ubicarse a 100 metros de una iglesia, escuela o área deportiva, cubrir el pago del documento de no adeudo. En caso de cumplir con estos requisitos, Llantada Ávila considera que se debería cumplir con la Ley y otorgarles el permiso a los interesados.
Comentó también que no se cuenta con información relacionada con los permisos que serán renovados para este 2025, pues el periodo de revalidación empezaría a partir del mes de julio. Sin embargo, harán el trabajo de empadronamiento antes de que llegue esta fecha.
Aunque es prematuro, Llantada Ávila calcula que alrededor de 100 permisos no han sido renovados desde hace más de dos años, e incluso agregó que hay algunos de hasta ocho años sin pagar los impuestos correspondientes. Sin embargo, los gobiernos pasados no habían iniciado el proceso de cancelación, por lo que revisarán sí están operando con permisos vencidos; o bien, dejaron de usarlos por diversos factores. Sea como sea, si no se van a utilizar, consideró que sería importante que fueran retirados para entregarse a empresas que les den el uso respectivo.
Respecto a que el aumentar el número de permisos de venta de alcohol no representaría un mayor consumo, para el funcionario esto no representa un incentivo, pues las personas que pretenden adquirirlas, acudirán a otra tienda en caso de que no encuentren en la primera opción.
Según la información del Instituto de Psiquiatría de Baja California, la población adulta que ha consumido alcohol es del 88 por ciento; en el último año un 72.6 por ciento; y el último mes un 51.5 por ciento. Particularmente el último número es el que preocupa a la institución de salud, sobre todo porque la droga de impacto para personas en tratamiento de adicciones en el Estado es del 9.3 por ciento relacionadas con alcohol.
“No van a ser muchos (permisos sin operar), van a ser los menos; lo que sí van a encontrar más son negocios que no tengan permiso, no sé si vendiendo o no. No se han dado permisos en años; yo pregunto por qué, hay que decirlo con responsabilidad, si la ciudad va creciendo. Recuperando y volverlos a otorgar, y otorgarlos, pero no estarían abiertos a dar más permisos; entre los que recuperamos y damos vamos a salir de unos más, creo que esa es la demanda actual creo que nos va a dar para cubrir”, refirió el funcionario quien detalló que no serían más de dos mil permisos los que se pudieran operar en Mexicali.
Agregó que tras la separación del municipio de San Felipe, Mexicali perdió un total de 160 licencias, por lo que cuentan con una cifra que pudiera cubrirse, lo que además sería benéfico para las arcas municipales.
Curiosamente, de sumar la cifra de licencias que fueron entregadas a San Felipe y las 100 que han detectado que no han sido renovadas, se alcanzaría una cifra de 260, cantidad similar al margen de poco más de 200 permiso que podrían otorgar con el candado del 15 por ciento de impuesto en el punto de acuerdo.
En el caso hipotético de entregarse los 200 permisos exclusivamente a tiendas de autoservicio, cuyo costo por emisión es de un millón 568 mil 120.4 pesos, se estaría hablando de una cifra de 313 millones 624 mil 080 pesos, por este concepto.
PODRÍA ACABAR CON EL MONOPOLIO: PAN
Para el regidor del PAN, Manuel Rudecindo García, la creación del programa pretende analizar la situación en la que se encuentran los negocios que expiden bebidas embriagantes, pues -aseguró- existen muchos que están vigentes -ya que se paga la revalidación- pero no están en uso; o bien, que se rentan por parte de las grandes empresas e impide que los pequeños negocios tengan su propio permiso.
“El gobierno tiene entre sus facultades determinar si te lo da o no, si hay personas que no tengan permisos de alcohol, salvo que lo compre a un particular o me amarre a mis productos nomás. Eso es la molestia que veo de algunos empresarios medianos o grandes, que dicen ‘yo quisiera tener mi negocio y estas empresas me buscan maniatar o condicionar de cierta manera’”, refirió el edil panista.
Comentó que el esquema de renta de permisos por parte de las grandes empresas no debería ser algo normal, aunque actualmente lo es, pues este tipo de medidas monopólicas convierte a los negocios en pequeños minirepresentantes de las empresas que los apadrinan, pues les restringen la venta de ciertos productos que pudieran ser competencia.
“Ellos controlan qué vender, quién te vende, el transporte, y al final hay un control del comercio; si tú compras un servicio de sobreprecio, a la hora de vender se lo vas a trasladar a quien consume, debe haber transparencia en cuánto cuestan. Sí hay que bajarle el costo a los permisos y perderle el miedo de entrarles temas tabúes, que esté normado, pero no normalizado”, sentenció.
Al respecto, el secretario del Ayuntamiento comentó que su intención no es entrometerse en acuerdos entre particulares, pero sí consideró que hay grandes empresas como Walmart, Bodega Aurrerá, Oxxo, entre otras, que carecen de este tipo de permisos porque simplemente no se ha permitido por el gobierno.

ES RECAUDATORIO: GONZALO MORENO
Quienes se mostraron inconformes con la medida anunciada por el Ayuntamiento de Mexicali es el colectivo de la Célula de Búsqueda de Baja California, pues este tipo de negocios son parte de los episodios de violencia en Mexicali, por lo que una visión recaudatoria no debería estar por encima de la seguridad del municipio.
“No tendría por qué analizarse esta situación; a todas luces hay una política recaudatoria por parte del municipio, y yo creo que es por lo perfiles empresariales que buscan generar recursos, pero el tema de permisos de alcoholes, en el clima de inseguridad de Mexicali hay que echarle leña al fuego”, refirió el activista quien desde hace más de dos años ha movilizado a una organización de búsqueda de personas desaparecidas, motivado por la desaparición de su hijo, Kevin Moreno, quien fue visto por última vez en el bar “Shots”, antes de que presuntamente un grupo delictivo lo privara de la libertad.
“Grupos organizados de criminales, se apoderan del negocio del alcohol ilegal, sin el permiso de ellos. Si se abren estos permisos abrirían una ventana para regularizar lo ilegal porque un permiso de alcoholes que cualquier comerciante local pueda cubrir; yo creo que debería analizarse este tema sin lograr contener el tema de seguridad y dejar a un lado el tema recaudatorio”.
Y es que, a su juicio, este es el primer paso para permitir un mayor número de permisos de alcoholes a supermercados y después a bares y antros, los cuales han incumplido la Ley que pretende reglamentar la seguridad en negocios de estos giros.
Pese a que ya se publicó un punto de acuerdo en el POE, el Comité Ciudadano de Seguridad Pública, dirigido por Ángel Zaizar Prado, afirmó que no les ha sido notificada la intención, por lo que desconocen los alcances de la iniciativa pretendida por el gobierno municipal. Esto pese a que forman parte del Consejo de Alcoholes.