Una camioneta tipo Caravan color guinda, otra marca Ford color blanco y un automóvil compacto color arena que transportan alrededor de ocho homicidas, así describieron testigos a una de las células delictivas que participó en al menos tres de los últimos asesinatos ocurridos en Tecate.
Durante la noche, los sujetos a bordo de estos vehículos irrumpen en domicilios, golpean, torturan y cometen homicidios. De día usan los mismos autos para pasear por las principales calles de la ciudad sin ser detenidos, pese a las más de 100 cámaras de seguridad instaladas a lo largo y ancho de la ciudad, reclaman temerosos quienes han declarado en su contra y aseguran después haberlos visto transitando tranquilos hasta perderse en el entronque de Bulevar Universidad y la carretera de cuota Tecate-Tijuana.
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Ninguna autoridad detiene el paso de este grupo armado, que a decir de investigadores, es lidereado por Héctor Barragán alias El Bélico, quien arribó a Tecate, particularmente a la zona ubicada después de la carretera de cuota rumbo a Ensenada, para apoderarse del área y sus principales puntos de compra, venta y almacenaje de estupefacientes. Lo acompaña un masculino identificado como El Pirata.
Desde hace años, Héctor Barragán o Cristo Rodrigo, como también se hace llamar, es identificado por las mesas de seguridad como parte de la estructura criminal del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), ahora refieren integrado recientemente al Cártel Arellano Félix (CAF) con el objetivo de desplazar al Cártel de Sinaloa de los alrededores de la zona urbana del Pueblo Mágico.
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Barragán es señalado de participar en el asesinato de la comandante Alejandra Hernández Villa, cometido en junio de 2023 tras asestarle más de 30 tiros al interior de su vehículo mientras se encontraba cargando combustible en una estación de la cadena RendiChicas en la colonia La Viñita.
En aquel momento, investigadores determinaron que el crimen fue perpetrado por El Bélico y Jesús Alfredo Martínez alias El Sonrics, este último localizado torturado y ejecutado en julio de 2024, en las inmediaciones de La Rumorosa. De acuerdo a las autoridades, por integrantes del CAF, grupo al que se había sumado días antes para unir fuerzas con el identificado como El Paquillo, quien ante el temor de una traición, terminó asesinándolo, revelaron fuentes de las mesas de seguridad.
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En aquel 2023, tras el asesinato de la comandante, El Bélico y El Sonrics huyeron del lugar sin ser detenidos, pese a que en su ruta de huida habia más de 12 cámaras de vigilancia del Centro de Control y Comando (c5) y del llamado C2, operado por la Policía Municipal de Tecate.
Se trata de la misma zona donde el 5 de marzo de 2025, integrantes del CJNG y de Sinaloa se enfrentaron a balazos a plena luz de día, sobre la avenida principal de las colonias Santa Anita y Las Torres, único acceso a la colonia Piedra Angular y Escorial.
Según las autoridades, usaron armas de grueso calibre para disparar desde vehículos compactos y camionetas Chevrolet, provocando pánico entre vecinos que esperaban el transporte público. Un camión de recolección de basura que circulaba en esa zona, resultó impactado por una de las camionetas de los criminales.
“Justo íbamos subiendo para la casa cuando se soltó la balacera, como es una calle donde hay muchos terrenos baldíos, no hallábamos para donde correr y resguardarnos, yo iba con mis dos hijos menores, duraron tres días teniendo pesadillas”, recordó uno de los afectados.
“Estaba esperando el camión cuando escuché los balazos, cuando menos pensé desde dos carros, uno pequeño y una camioneta ya estaban aquí en esta calle y tuve que meterme con la señora de la esquina, llegué a mi casa con el azúcar a todo lo que da”, comentó a ZETA uno de los testigos.
“El pobre trabajador que venía colgado del camión de la basura ni vio venir el impacto cuando ya estaban chocados en medio de los balazos, por allá salió volando y el chofer no sabía si bajarse o ahí quedarse”, relató otro vecino.
“Estamos hartos, no es la primera vez que esta colonia pasa por situaciones así, aquí todos sabemos dónde viven los malandros, pero qué hacemos, ni modo que denunciemos cuando son los propios policías quienes les informan quiénes andan poniendo dedo, al rato terminamos desaparecidos como tantos y ellos siguen ahí andando”, reclamó un ciudadano.
Los hechos delictivos registrados ese 5 de marzo cobraron la vida de un masculino, al que investigadores consideran parte de los presuntos delincuentes de los cárteles Jalisco y de Sinaloa que viajaban en los vehículos enfrentados.
Conforme a la versión de los investigadores, en la zona del enfrentamiento han cateado casas de seguridad de la mafia sinaloense.
SIN RESULTADOS
Entre febrero y marzo del año en curso, homicidas de ambas células se han enfrentado y se están matando unos a otros.
Como parte de esta jornada mortal, Isaí Cejudo, de 26 años, fue asesinado el jueves 13 de marzo frente a su casa. En Calle Vicente Guerrero de la colonia El Mirador, quedaron seis casquillos calibre 9 milímetros. Líneas de investigación refieren la participación de esta arma en un homicidio previamente ocurrido en esa ciudad.
Residentes cercanos refirieron que de manera constante el joven hacía alusión a pertenecer a un grupo delictivo.
A las 08:10 horas del viernes 14 de marzo, un masculino de 52 años identificado como Fernando Arellano fue privado de la libertad del interior de un taller de carrocería ubicado en Calle Jesús Hernández de la colonia Piedra Angular.
A la vista de uno de sus hijos, hombres armados lo obligaron a seguirlos hasta la calle tras irrumpir el lugar, forzando una de las puertas de herrería de la entrada principal, para después subirlo a los vehículos en los que se transportaban, una Tahoe y dos de los mencionados como el convoy armado que circula por el puente (Caravan guinda y el compacto color arena). El mismo grupo de autos fue identificado en el homicidio cometido horas antes contra Isaí Cejudo.
El cuerpo de Fernando Arellano se localizó tres horas después de su sustracción con múltiples huellas de violencia, como el rostro destrozado a golpes, visibles heridas a causa de los llamados tablazos y uno de los dedos del pie removido, al igual que su oreja, y escribieron una N en su espalda. El cuerpo estaba semidesnudo, vestía un bóxer color gris y fue abandonado a plena luz del día en un predio de la colonia El Mirador, donde también residía Isaí.
Como parte de este enfrentamiento entre células criminales, la fiscalía registra el asesinato ocurrido el 4 de marzo en la colonia Maclovio Herrera, a un costado de la colonia El Mirador: a las 21:20 horas, Bersabeth, de 20 años, viajaba acompañada de un masculino identificado como Alberto a bordo de una camioneta Lincoln Navigator color gris sobre Bulevar Santa Anita; tres vehículos les dieron alcance para disparar en más de 30 ocasiones contra su humanidad, quedando “Bentsy” sin vida en el lugar y su acompañante herido de bala, negándose a ser trasladado a un hospital.
EXIGEN PARAR LEVANTONES Y DESAPARICIONES FORZADAS EN TECATE
Integrantes de los colectivos de búsqueda de Tecate informaron a ZETA que de enero a marzo de 2025 se han registrado aproximadamente 40 desapariciones forzadas, sin que a la fecha se cuente con datos para dar con el paradero de aquellos privados de la libertad. Aseguran que los datos para integrar las fichas de búsqueda siguen llegando mientras las autoridades ponen a prueba la seguridad del llamado Pueblo Mágico.
“Desde los años 2019 y 2020 no se veían estos números, mi escritorio no contaba con la cantidad de datos que se encuentran en espera de ser vaciados para emitir una ficha de búsqueda para que la comunidad pueda identificar a quienes han sido sustraídos de manera forzada de sus hogares, trabajos o de la calle”, señaló una buscadora e integrante del comité de seguridad de su colonia.
“Tengo 36 fichas constituidas del 1 de enero a la fecha que integran al menos cinco personas que en el marco de año nuevo fueron reportadas como desaparecidas. Es lamentable que se priorice un proyecto político y no el bienestar social, apenas hace un par de semanas vimos el nombramiento de quien hoy ocupa la cabeza de la Policía Municipal, pero estamos hablando cinco meses en los que se puso a prueba la seguridad de ciudadanos y aquí tienes el resultado: desapariciones, un actuar impune de grupos delictivos que asesinan, torturan y se enfrentan a plena luz del día sin que autoridad alguna les haga frente a ellos”, agregó.
Por su parte, expertos en materia de seguridad y comerciantes consultados por ZETA, aseguran tener temor de hacer declaraciones, ya que son víctimas de la delincuencia con el cobro de piso.
“Confiamos en que pudiera haber un cambio porque realmente urge, la delincuencia nos rebasó y hoy un 20 por ciento de los comercios han sido victimas de una extorsión o incluso el cobro ya constante de piso por trabajar”, expuso un comerciante de manera anónima.
El temor de salir a espacios públicos durante la noche es latente:
“Claro que vivimos con miedo, por mí, por mis hijos, mis amigos, yo he conocido personalmente y también de vista, a personas que han sido víctimas de desaparición e incluso asesinados, y no tengo en conocimiento que anduvieran en malos pasos. El problema principal como sociedad es que ya normalizamos que todo esto pase, los desaparecidos, los asesinatos, los escuchamos a diario, pero no sabes el impacto hasta que te alcanza y sabes qué es, pero cuando me pasó, como madre me di cuenta que nadie va a ir a ayudarte. Claro que gritamos justicia, pero aunque lo hagamos hasta que la garganta nos sangre, no hay quien quiera escuchar”, remató una madre buscadora que lleva más de cinco años esperando el regreso de su hijo de la manera que tenga que ser, “pero que vuelva”.
