Este martes 3 de diciembre, la Fiscalía General de la República (FGR) realizó un cateo y aseguró las instalaciones del Hotel Remy en Tijuana, tras sospechas de que en el inmueble operaba una banda de traficantes de personas conocida como “polleros.”
De acuerdo con información obtenida por ZETA, el inmueble, ubicado sobre el bulevar Díaz Ordaz en la colonia Contreras, fue inspeccionado como parte de una investigación federal. El operativo fue llevado a cabo por agentes de la FGR en coordinación con elementos del Ejército y la Guardia Nacional.
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Una fuente reveló que durante el cateo se revisaron bitácoras, se entrevistó al personal y se analizaron grabaciones de las cámaras de seguridad, material que será integrado en la carpeta de investigación.
Según trascendió, la banda de traficantes de personas que operaba desde el hotel está vinculada a un incidente ocurrido el 4 de noviembre en la delegación La Rumorosa, en Tecate. En este hecho, elementos de la Guardia Nacional dispararon contra un vehículo que circulaba por la autopista Tecate-Tijuana, a la altura del kil
ómetro 62+500.
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En el vehículo, una Nissan X-Terra blanca conducida por un mexicano, viajaban migrantes de nacionalidad colombiana que habían sido engañados con la promesa de ser llevados al muro fronterizo para cruzar ilegalmente hacia Estados Unidos.
El ataque resultó en la muerte de dos migrantes, identificados como Ronaldo Andrés Quintero Peñuelas, de 20 años, y Yuli Vanessa Herrera Marulanda, de 37. Además, cuatro personas resultaron heridas y fueron trasladadas a un hospital para recibir atención médica.
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Según el Informe Policial Homologado, tras el ataque armado, algunos integrantes de la banda huyeron del lugar y se trasladaron a Tijuana.
Por el momento, y mientras se realizan las investigaciones, el Hotel Remy permanece bajo resguardo federal.
