Ante casos exhibidos principalmente en el municipio de Los Cabos, la titular de la Secretaría de Educación Pública de Baja California Sur (SEPBCS), Alicia Meza Osuna, reconoció que las escuelas de la entidad presentan un rezago de hasta dos años en materia de infraestructura eléctrica.
La funcionaria aseguró que esto se debe principalmente a desfases de tiempo en la compra de equipamiento, como transformadores, que no se pueden conseguir directamente en el estado y que deben esperar a que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) resuelva los pedidos.
Asimismo enfatizó en que la CFE no cuenta con “la gran cantidad” de verificadores para que, inmediatamente, recurran a verificar las condiciones eléctricas de cada inmueble escolar.
“Efectivamente, tenemos un rezago de dos años también; no solamente de la escuela de Vizcaíno, tenemos de otras escuelas, pero como te decía, a veces damos prioridad a las escuelas que son muy grandes, de mucha matrícula”, reiteró.
En el caso de Los Cabos, la Secundaria Técnica #14 llegó a parar las clases por las complicaciones que se presentaron por la falta de un transformador.
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Padres y madres de familia colgaron una lona, dirigida al gobernador del Estado, Víctor Castro Cosío, con el siguiente mensaje:
“Le exigimos pronta solución al problema de la luz ya a un mes de trámites burocráticos y nuestros hijos sin poder estar en las aulas en óptimas condiciones para estudiar”.
Ante escenarios como este, Alicia Meza exhortó a las comunidades escolares a que tengan paciencia, asegurando que todas las solicitudes que se han hecho están en el trámite correspondiente, para resolver las problemáticas con la infraestructura eléctrica.
“Vamos haciendo las gestiones que corresponden, no es rápido el asunto. Hay escuelas que requieren transformadores que no se compran de un día para otro y que no están en existencia en la Capital, sino que se tienen que encargar algunos. No resulta muy rápida la compostura que se necesitan”, declaró.
Tras mencionar que “duele mucho” que las escuelas paren, explicó que hay ocasiones en que los inmuebles pueden continuar dando clases: aunque sin aire acondicionado, sí con agua potable y energía para las instalaciones.
Por su parte, el gobernador subrayó que se trata de una problemática que ya tienen en la mira y que irá mejorando en el sexenio de la Presidenta Claudia Sheinbaum.
“La infraestructura escolar está caída en muchísimas escuelas; algunas ya por su actividad histórica, nunca fueron rehabilitadas, como pasó con la Carranza: se fracturó porque tenía más de 50 años, y así están muchas escuelas, desafortunadamente. Entonces, la inversión para infraestructura debe ser bastante grande”.
“Es uno de los planteamientos que estamos haciendo a la Presidenta; avanzamos por las prestaciones de los trabajadores, pero ahora tenemos que buscar mejorar la infraestructura”, insistió.
