“Aquí se encuentra la clave de todos los grandes discursos… Que el orador vea a través de todos los velos la eterna escala de la verdad, de tal suerte que la pueda levantar ante los ojos de los hombres en íntima relación con este modelo, presentado lo grande, grande, y lo pequeño, pequeño, que es el verdadero camino de admirar y de reformar a la humanidad”.
-Ralph Waldo Emerson, Ensayos.
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La elocuencia es el mejor discurso de la mejor alma. Las redes sociales nos facilitan en estos momentos la gran riqueza parlamentaria proveniente de las cámaras legislativas nacional y estatales, un reto a la paciencia de diputados y senadores, especialmente de oposición.
Baja California no es la excepción, en especial el licenciado Gustavo Sánchez Vásquez. Se preguntarán en la Ciudad de México, ‘¿éste de dónde salió?’, pues del Salvatierra y de la UABC, como Fernández Noroña del Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH) y de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).
Apunta el pensador estadounidense Waldo Emerson que “todos los primeros oradores del mundo fueron hombres serios apoyados en esta realidad. Los filósofos contemporáneos de Demóstenes ven que en todos sus discursos flota un pensamiento, que es el siguiente: ‘La virtud asegura su propio éxito’. ‘Mantenerse sobre sus propios pies’”. Aquí se encuentra la clave de todos los grandes discursos.
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La mayoría de los segmentos digitales en video en la confrontación entre el senador Yunes, de Veracruz, y Marko Cortés, describen la inexperiencia del presidente del PAN, hostigando al ex gobernador veracruzano por el PAN. Así, Cortés no sólo se desdibujó retóricamente contra los dos perredistas y el mismo ex secretario de seguridad del presidente Vicente Fox. Casi casi le dice que En haciéndose el milagro, no importa que lo haga el Diablo. Falso, como el beso de Judas.
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Con motivo de las reformas jurídicas al artículo 130 Constitucional, los notorios desencuentros y agarres en el mismísimo Centro Cultural de Tijuana (CECUT), entre el memorable profesor Jesús Juvencio Ruíz Barraza, ex presidente del PRI en BC, y el notable abogado magallonista Antonio Limón (PAN). Casi le pasaban por encima a Monseñor Cisneros, impotente ante la retórica de palabras trastornada en golpes.
El gran Emerson dice que la más alta plataforma de la elocuencia es el sentimiento moral; lleva dentro de sí una idea de la eternidad, cuando se siente establecido sobre un terreno que permanecerá siempre, aunque todo lo demás desaparezca, y que no tiene rastro alguno de tiempo o de lugar o de partido.
Esto les recordó a los senadores mexicanos, como el de Baja California, Gustavo Sánchez Vásquez; “dicen que en competencia es muy malo no saber perder, pero es más malo no saber ganar”. Y remató su participación ante 128 senadores (sólo 23 de ellos repitiendo) con una frase de don Benito Juárez que parece que no entendieron, ante una reforma jurídica que destruirá la República Mexicana y la separación de los poderes: Ejecutivo, Legislativo y Judicial. Sin faltarles al respeto a sus colegas legisladores de la Cámara Alta, Sánchez, evocando a Juárez, expresó: “Contra la Patria nunca tendremos la razón”. La Patria es mucho más que cualquier acuerdo. (Versión completa en YouTube) (Gustavo Sánchez Senador: https://www.pan.senado.gob.mx).
La sesión ordinaria y civilizada en la Cámara de Senadores fue desquiciada por manifestantes que obligaron a suspender los trabajos legislativos; se enfilaron a denostar al senador (PAN) Miguel Ángel Yunes, de Veracruz, aún sin participar con su voto. Bien lo dijo él mismo, tembloroso: se trató más de un linchamiento que de un parlamento.
Diría la raza que le tiene encendida una vela a Dios y otra al diablo. Y su fracaso está asegurado porque El que a dos santos sirve, con ninguno queda bien.
Hay que admirar la riqueza de los discursos y de las clases de elocuencia que se originan en ambas cámaras legislativas… Maderas hay para santos, y otras para hacer carbón.
Germán Orozco reside en Mexicali, B.C.
