La Fiscalía General del Estado (FGE) arrestó a Manuel “N” como presunto feminicida intelectual en contra de su esposa, la enfermera Gabriela Janette Gutiérrez Aguilar, quien fue atacada a quemarropa el 12 de julio al regresar a su hogar en la colonia Mariano Matamoros, en Tijuana. Este viernes 30 de agosto se celebrará la audiencia de vinculación a proceso.
Por 40 días Manuel “N” burló las investigaciones de la Fiscalía. Durante las entrevistas con familiares, surgieron detalles sobre los desencuentros matrimoniales, lo cual llamó la atención de los investigadores, a quienes les pareció sospechoso el comportamiento del viudo respecto a las pertenencias de la víctima y su insistencia en que se hiciera “justicia en el caso”.
“El comportamiento del viudo, junto con la información proporcionada por el círculo cercano a la víctima, que también era cercano a él, nos llevó a dudar y a investigar más a fondo su actitud”, explicó el Fiscal Central Rafael Orozco.
El 12 de julio, Gabriela regresó a su hogar en la calle Batalla de Oaxaca. Mientras caminaba hacia su casa, fue emboscada por un hombre encapuchado que se encontraba a bordo de un auto sedán. Su hijo de 17 años fue testigo del trágico momento en el que Gutiérrez fue asesinada. Desde entonces, ha sido difícil conversar con él, según las declaraciones de Manuel “N”, quien lideró las protestas organizadas por los trabajadores del Hospital Materno Infantil de Tijuana, compañeros de la víctima.
Las investigaciones de la FGE revelaron que la pareja vivía en la misma casa junto con sus dos hijos: el joven de 17 años y una niña de cinco. La dinámica hostil entre Manuel y Gabriela incluía sospechas de relaciones sentimentales fuera del hogar. Gabriela mantuvo una relación extramarital durante un tiempo indefinido, lo que provocó los celos y malestar de Manuel, quien planearía el ataque contra su esposa, haciéndolo pasar por un asalto o un ataque fortuito.
Durante un mes y medio, Manuel “N” estuvo en el lugar del crimen y trató de confundir a la justicia para evitar ser involucrado en el asesinato. Ahora enfrentará a un juez que evaluará sus declaraciones y las pruebas presentadas por la FGE.
