El pasado 24 de junio de este año 2024, se inauguró en la desembocadura del Río Zhejiang, el nuevo corredor Shenzhen-Zhongshan, una autopista con una longitud total de 24 kilómetros. Consta de un túnel submarino de 6.8 kilómetros con dos islas artificiales en los extremos, y un puente de mil 666 metros de largo, con dos torres en los extremos de 270 metros de altura. El puente estará a 90 metros sobre el nivel del mar. El corredor consta de ocho carriles en total, cuatro en cada sentido de circulación.
Este proyecto prevé el crecimiento que tendrá la demanda de más carriles de circulación en los próximos 10 años. Esto viene a colación porque en estos momentos se construye en la ciudad de Tijuana el Viaducto Elevado del Aeropuerto a Playas de Tijuana, un proyecto muy importante para la ciudad de Tijuana, que arrastra desde hace muchos años un deterioro paulatino en cuanto a movilidad urbana en constante crecimiento, todo por la falta de una planeación a futuro.
En 1975 se llevó a cabo en esta ciudad el primer Congreso de Ingeniería Civil, auspiciado por el Colegio de Ingenieros Civiles de Tijuana, AC. Un servidor, miembro activo de ese colegio, presentó una ponencia que básicamente abordaba el problema de la movilidad urbana de esta ciudad, la cual se titulaba “Bosquejo del Plan de Desarrollo Vial de la ciudad de Tijuana”.
Desde aquel entonces ya empezaban a sentirse algunos congestionamientos, tanto en el bulevar Díaz Ordaz como en las vías rápidas Oriente y Poniente, porque éstas han sido desde siempre las únicas tres vialidades que teníamos de Oriente a Poniente.
En dicha ponencia se proponía básicamente la construcción a futuro de tres circuitos viales: Oriente, Central y Poniente, con las mismas características de las grandes autopistas de California de seis carriles en cada sentido. Cuatro carriles de circulación continua, con acotamientos a ambos lados para paradas de emergencia. La idea fue bien recibida por los asistentes al congreso, no así al secretario de Obras Públicas del Gobierno del Estado de aquel entonces, quien estaba presente: Ing. José Antonio Sánchez Hernández, aduciendo que no se necesitaban por el momento vialidades de ese tipo.
Yo le dije al secretario que efectivamente por el momento no, pero con el tiempo sí. Ahora, a casi 50 años de aquel memorable congreso, nuestra bella Tijuana se debate en un caos de vialidades angostas; circular por sus calles es un verdadero problema, estamos viviendo las consecuencias de una mala planeación, de no prever nuestro futuro. En el circuito Poniente que se proponía en dicha ponencia, justamente la Av. Internacional formaría parte de ese circuito; ahora en dicha avenida se construye el Viaducto Elevado Aeropuerto Playas de Tijuana de cuatro carriles.
Yo pregunto: ¿Por qué de cuatro carriles? ¿Por qué no de seis u de ocho? Los grandes proyectos se pueden hacer por etapas… ¿por qué no se pensó en un viaducto de dos pisos? Primera etapa: Cuatro carriles en un piso y se dejan las preparaciones para hacer el segundo piso posteriormente. De esa manera resolvemos a futuro el problema de la circulación de vehículos.
Como ingeniero civil cuestiono seriamente el proyecto del famoso Viaducto Elevado Aeropuerto- Playas de Tijuana. Concluyo: No resolverá el problema de la circulación de vehículos; en poco tiempo se congestionará el viaducto.
Hasta aquí mi comentario.
Atentamente,
Ing. Rubén Orozco Reyes, posgrado en Vías Terrestres.
