Cárdenas, en la práctica, fue el primer presidente que gobernó durante seis años. El penúltimo militar, antes de Manuel Ávila Camacho, nacido en Puebla, el reformador que daría su identidad definitiva al partido tricolor. Con Miguel Alemán Valdés comenzaría el periodo de los gobernantes civiles.
Sabemos de antemano que los marinos y militares cuentan con vehículos blindados, pero que no los usan para hacer recorridos por la sierra; es por ello que no estaría mal que a los vehículos de redilas que actualmente están usando, al menos sobre las redilas les adaptaran unas láminas aceradas con unas 10 mirillas por cada lado.
Milei no es ningún chiflado. Es un ultraderechista franco. Un hitleriano sin careta; hoy, por mandato de la oligarquía financiera, candidato presidencial “ganador” del reciente circo electorero argentino.
Este recién episodio perverso de secuestrar los donativos de grupos ciudadanos, religiosos, caritativos y civiles tras el huracán Otis, para que se los apropiaran sólo su partido Morena, el ejército, Marina y Guardia, y luego hacer “raja” de propaganda por adornarse con sombrero ajeno de ser los bondadosos, lo exhibió de tan grotesco.
Se corrompe el sufragio por la intriga y el soborno, vicios de las clases elevadas; la ambición de cargos es más fuerte en los nobles que en el pueblo, ya que éste se deja llevar por la pasión.
Pueblo de Tijuana, la ciudad crece a ojos vista. Hoy somos dos millones. Nos acosan los males de crecimiento, de transportación, de falta de agua, de crimen organizado y desorganizado, de salud, etc.
El trampolín político en la flamante 4T es señal inequívoca de tales políticos chapulines, que dejan un cargo y buscan otro, pues se creen seguros de que todos los mayores de 65 años votarán por ellos.
Tan sólo una pregunta: ¿Por qué Bonilla, después del asesinato de la periodista Lourdes Maldonado, no fue llamado a declarar? No olvidemos que al susodicho déspota no se le ha molestado. En lo absoluto. Hasta la fecha.
Muchos tijuanenses, nacidos y adoptados, se entristecieron cuando fue demolido el Toreo de Tijuana, ubicado en Blvd. Agua Caliente. Así hoy en día, en México, siguen prohibiendo la fiesta brava, y el arte del toreo y sus toreros se quedan sin su oficio o profesión.