De Trez en Trez
Uno.- Dígase lo que se diga desde “la mañanera”, o lo que repiten corifeos del Gobierno Federal, ni lo que les han hecho creer a sus ciegos y convenencieros seguidores (y menos lo que divulga la publicidad pagada y engañosa), la inseguridad, la violencia y la impunidad continúan escalando a lo largo y ancho del país.
Así lo indica la realidad diaria que vivimos y que se adereza con la desvergüenza de quienes dicen gobernar al país y a los estados donde evidentemente, manda la delincuencia organizada y desorganizada que aprovecha la ausencia de autoridad, haciendo y deshaciendo a su antojo.
Tampoco es cierto que se ha reducido la criminalidad, ni que “…en todo México late la esperanza, en todo México se respira amor”, como se escucha en el “jingle electorero”que promueve a Claudia Sheinbaum, la candidata de Morena a la presidencia, quien promete/amenaza con darle continuidad a las políticas públicas del Presidente.
¿A quién quieren engañar? Lo que sucede un día sí y otros también le propina una bofetada en pleno rostro al pretendido cambio y a la falsa transformación que presume AMLO y todo su aparato de gobierno.
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López Obrador está en el final de su sexenio con más de 180 mil homicidios dolosos, según el informe “Homicidios en México, Registro diario e histórico de los homicidios cometidos en el país”, actualizado al 1 de marzo de 2024 de la empresa TResearch International (https://www.tresearch.mx/post/homicidios-mx) basado en información de del SESNSP y del Inegi, que reportan un promedio diario de 95 homicidios, uno cada 15 minutos.
Es decir, 60 mil homicidios más que en el sexenio de Felipe Calderón (120 mil 463) al que culpa de todo; tres veces más que en el periodo de Vicente Fox (60 mil 280); y más de 100 mil que los registrados con Carlos Salinas de Gortari (76 mil 767).
Doz.- Para completar el fracaso de la política de “abrazos, no balazos” ahí está lo que ocurre en Sinaloa, Guerrero, Michoacán, Veracruz, Edomex, CDMX, Tabasco, Chiapas, Morelos, Colima, Baja California, Sonora, Nuevo León, Campeche, Zacatecas: lo mismo amenazan, asesinan, roban, asaltan, les cobran piso que secuestran masivamente a los ciudadanos y luego dicen sus “autoridades” que “…son cosas que suceden.” Incapaces de actuar, esperan a que los pillos liberen a sus víctimas.
Sucede esto por la incapacidad, negligencia y acaso complicidad de sus “des-gobernadores”, entre los que se cuentan a Layda Sansores San Román, Rutilio Cruz Escandón, Martí Batres Guadarrama, Indira Vizcaíno Sila, Evelyn Salgado Pineda, Delfina Gómez, Alfredo Ramírez Bedolla, Cuauhtémoc Blanco Bravo, Samuel García, Rubén Rocha Moya, Francisco Alfonso Durazo Montaño, Carlos Manuel Merino, Américo Villareal, Cuitláhuac García, David Monreal y por supuesto Marina del Pilar Ávila… por citar a algunos “notables”.
La mayoría están ahí por otras razones y no por sus méritos o por su eficacia en gobernar y respetar las leyes, como se comprometieron al tomar posesión de sus cargos; por el contrario, parece una competencia a ver quién es más malo para gobernar y mejor en adular al Presidente López Obrador y todo cuanto haga. Casi reptan.
Trez.- Casi al final de su periodo, AMLO queda a deber… Y mucho. Continúa la improvisación, el “ahí se va”, sus caprichos y sus berrinches; sigue en deuda con las víctimas de ilícitos, a los que se niega a recibir; insiste en las mentiras y en los abrazos y presume seguir siendo “Miss Simpatía” en las encuestas que miden su popularidad.
P.D.- Dice AMLO que “el proceso electoral transcurrirá en paz y tranquilidad, no hay que tener miedo”. ¿Usted lo cree?
Óscar Hernández Espinoza es egresado de la Facultad de Derecho por la UABC y es profesor de Cultura de la Legalidad y de Formación Cívica y Ética en Tijuana.
Correo: profeohe@hotmail.com
