Luna de esta primavera
vienes vestida de flores
y una linda petenera
te cantan los ruiseñores.
Luna de marzo divina:
te adornan blondos caireles,
encajes de muselina
y diamantinos pendientes.
Te admiran en todas partes
cuando navegas el cielo
con tu vestido de encajes
y una diadema en el pelo.
Te cuentan de sus amores,
de nostalgia, de tristeza,
de profundas ilusiones,
de sinsabores y penas.
Eres luna de mi infancia,
del futuro, del presente,
y nunca tu luz nos falta,
hermosa diosa Selene.
La luna de enamorados
que al amparo de su luz
y con temblor en las manos
se besan de norte a sur.
A los poetas inspiras
y eres estela en sus versos;
al verte todos suspiran,
el mar robó tu reflejo.
Eres la luna de marzo
vestida de primavera,
te cubre un mágico manto
bordado con sol y estrellas.
Lourdes P. Cabral
San Diego, California