Con 241 homicidios en lo que va del año, 82 de los cuales se cometieron entre el 1 y el 14 de febrero, Tijuana se mantiene a la cabeza de la violencia en Baja California.
Sobre el incremento de ataques, autoridades destacaron violencia interna en el Cártel de Sinaloa: “En las últimas tres semanas, han aumentado el número de asesinatos en la zona de La Presa, Mariano, Florido, La Morita, Maclovio Rojas, Urbi Villas, Natura y Terrazas del Valle en Zona Este. Es una zona bajo el control criminal de los hermanos y primos Uriarte, encabezada por José Luis Mendoza Uriarte el Güero Chompas, asociados con el Cártel de Sinaloa, pero los elementos a disposición de la autoridad muestran que Edwin Antonio Rubio López el Max y su jefe de matones, El Moreno, ambos al servicio de los hermanos Arzate, también del cártel sinaloense, han decidido ampliar su territorio y tomar los puntos de venta de los Mendoza Uriarte”.
Justo en esa “pugna interna”, los investigadores destacaron que sólo el 9 de febrero fueron asesinadas siete personas en la delegación La Presa de Tijuana.
En dos ataques armados en la colonia Tejamen y Terrazas del Valle, un hombre resultó muerto y una mujer lesionada en la primera dirección, mientras que en la segunda murió Adriana López Aldape. Casi al final del día, alrededor de las 23:00 horas, se reportó que en la calle Paseos de Santa María, a la altura de la Privada Santo Tomás, habían abandonado una camioneta tipo panel Ford F150, placas de circulación 79800J3 del Estado de California con reporte de robo del 5 de febrero. En el interior estaban cinco cuerpos sin vida, todos varones.
Hasta el miércoles 14 de febrero, investigadores habían identificado a cuatro: José de Jesús Marentes Martínez, Gregorio Muñoz Villagrán, Jesús Espinoza y Javier Adame Moreno. Los primeros tres tenían antecedentes menores, y Adame por privación de la libertad, delitos sexuales y lesiones por arma de fuego.
A todos los asesinaron por asfixia, estrangulados con un alambre (dejaron uno en uno de los cuerpos), sin embargo, el cuarto presentaba más signos de violencia y un impacto de bala en la cabeza.