Alrededor de las 3:50 de la tarde del lunes 18 de septiembre, el 911 de Los Cabos recibió la llamada de Luis Fernando. Estaba aterrorizado. “Estaba muy alterado y solicitaba la presencia de las unidades ya”, dijo el oficial primer respondiente.
El reportante, quien venía acompañado de Celeste, recibió a los policías. Les dijo que tenía tres días buscando a su amiga, por lo que acudió a su domicilio en las calles Tomás Ruiz Villa y Oceanografía en la colonia Guaymitas en San José del Cabo, en Los Cabos. La joven vivía en unos departamentos atrás del OXXO y Farmacias YZA.
De acuerdo al testimonio de los amigos de la víctima, identificaron a quien en vida llevó el nombre de Ali Jasel Suárez Reyes, de 31 años, y originaria de Santa Rosalía, municipio de Mulegé y de ocupación médico general de la clínica número 38 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), ubicado a unas cinco cuadras desde su casa.
Además, informaron que “llegaron a la casa porque no atendía sus llamadas y decidieron ir a su casa e ingresar a su cuarto; y al entrar observaron una maleta de color rosa y vistas grises y envuelta en cinta canela sobre la cama. Llegamos y ya estaba abierto el cierre y rota la cinta, presumimos que fueron sus amigos quienes la abrieron para ver qué había en su interior”, indicaron los oficiales.
Al confirmar que se trataba del cuerpo de una persona, doblado y colocado al interior de la maleta, los elementos policiacos acordonaron el sitio para resguardar la escena del crimen.
La Procuraduría General de Justicia en el Estado (PGJE) confirmó que los restos de Ali habían sido vulnerados con el uso de la fuerza, por lo que se abrió la investigación por el presunto delito de feminicidio.
La pareja de amigos estaba muy alterada por lo ocurrido y lo traumático de ver a la joven de 31 años sin vida al interior de una maleta; viven a aproximadamente un kilómetro de distancia y lamentaron no haber llegado antes.
Con este caso, suman ya “14 feminicidios en San José del Cabo, la ciudad más peligrosa para ser mujer en Baja California Sur”, según colectivos feministas.
Inmediatamente se movilizaron familiares y amigos a través de las redes sociales para exigir justicia y que las autoridades del estado actúen de inmediato para esclarecer los hechos.
La información llegó a la Mesa Estatal de Seguridad Pública, quienes desde muy temprano organizaron operativos en la zona de Monterreal, Guaymitas y alrededores, logrando acercarse al parecer con Javier “N” de 22 años, presunta pareja sentimental de Ali, para obtener información, sin lograr establecer conexión con el crimen.
Así continuaron los operativos en diversos inmuebles. Incluso la Agencia Estatal de Investigación Criminal de la PGJE informó a ZETA que estaban muy adelantadas las investigaciones sobre el feminicidio de Ali, que también fue conocido en Palacio de Gobierno, donde lamentaron el suceso.
“Doctora de Santa Rosalía que trabajaba en el seguro social… Se están haciendo las investigaciones. Este hecho es un acontecimiento desafortunadamente complicado porque la compañera doctora tenía apenas un tiempo en Los Cabos; muy joven. Nos entristece y lamentamos mucho su muerte y la forma en que fue asesinada. Es un feminicidio que estamos investigando. Yo espero que pronto tengamos respuesta de la Procuraduría. Me uno al dolor de la familia que deben de estar sufriendo esta situación”, externó Víctor Manuel Castro Cosío, gobernador de Baja California Sur.
LAS ÚLTIMAS HORAS DE ALI
Pasaron 42 horas desde la última vez que la pareja de amigos de Ali Jasel la despidieron con rumbo a su casa, sin jamás volver a saber de ella. Ella les había dicho que iría con una amiga a una fiesta mexicana, sin dar mayores datos.
La charla de la Agencia Estatal de Investigación Criminal Luis Fernando y Celeste, amigos de Ali, dio muchos datos para seguir la pista de las últimas horas de vida de la doctora del IMSS, ultimada en su departamento de Guaymitas.
La última vez que vieron a la joven fue en el interior de su vivienda, aproximadamente a las 21:09 horas del sábado 16 de septiembre, en la esquina de Forjadores y Playa Punta Gorda, de la colonia Lomas del Rosarito, a unos mil metros de distancia del departamento donde la hallaron sin vida.
Esa misma noche, según compartieron sus amigos, Ali Jasel subió a su estado de WhatsApp, indicando que estaba en el Bar Baja Brewing, ubicado en la avenida José María Morelos entre Ignacio Comonfort y Álvaro Obregón, en el centro de San José del Cabo; se desconoce con quién estaba esa noche.
Conforme pasaban las horas, Ali continuó subiendo estados de WhatsApp. “Siempre lo hacía, era raro que dejara de hacerlo”, documentaron los oficiales. En otro estado compartió que se encontraba en el antro denominado “El Arroyo”, ubicado en Avenida Centenario en el centro de San José, siendo el último sitio que publicó en su red social.
Para los amigos de la víctima, la situación se tornó algo rara, pues a decir de ellos, horas más tarde, la doctora del IMSS escribió textualmente en su estado que “tenían a su amiga detenida, que estaban pidiendo dinero (para liberarla), que si la podían apoyar con dinero para poderla sacar”, indicaron los cercanos de la víctima.
Sin embargo, en la madrugada se percataron que “en otro estado puso textualmente que ya la habían sacado y ya no tuvo comunicación”, dice el parte oficial de los agentes.
A Celeste y Luis Fernando se les hizo muy extraño y por lo mismo decidieron asistir a su domicilio, donde la encontraron sin vida y en el interior de una maleta. Ellos afirmaron desconocer con qué amiga salió esa noche de sábado; tampoco supieron que pasó en el inter, pues contestaban su teléfono, pero se escuchaba extraño.
SE ACABÓ LA TRANQUILIDAD
Apenas a inicios de septiembre, luego de que a Vianey Hernández Alonso de 26 años, su ex pareja trató de privarla de la vida, al atropellarla y arrastrarla con el auto, y que levantó una denuncia por el delito de feminicidio en grado de tentativa, el Gobernador del Estado minimizó los ataques contra las mujeres.
Aunque los semáforos en rojo estén encendidos en Los Cabos por los delitos de violación, lesiones dolosas y violencia familiar, refirieron que el asesinato a sangre fría de Ali Jasel es un hecho aislado y no un común denominador de ataques en contra de las mujeres.
Por otro lado, Oscar Leggs Castro, alcalde de Los Cabos hizo un llamado a las autoridades de procuración de justicia para que atiendan la solicitud de los habitantes cabellos en exigir justicia.
Víctor Castro calificó de barbarie el acto repudiable de privar de la vida a la doctora del IMSS, la cual -según el gobernador- tenía muy poco de haber llegado hasta Los Cabos para trabajar en la clínica 38.
Oficialmente estaríamos hablando del segundo feminicidio en Baja California Sur, siendo el primero el caso de Monserrat, de 32 años, originaria de Durango, quien fuera ultimada a golpes con herramienta mecánica el pasado 29 de marzo, y abandonada en una brecha de la colonia La Pasión en el municipio de La Paz. Su agresor César Omar Palma Ramírez, de 31 años, la golpeó a muerte con una llave stillson y la llevó a una brecha para abandonarla junto con el auto.
“Es un acto de barbarie, desalmado, repudiable, como cualquier otro hecho que se atente contra las mujeres; íbamos muy bien, sólo dos feminicidios que son realmente… No debe haber ni uno, pero este nos empaña lo que veníamos teniendo, ya casi nueve meses; en agosto no hubo ningún acto de violencia, en septiembre llevábamos 16 días sin ningún hecho de violencia, y viene empañar la tranquilidad de Baja California Sur este hecho”, dijo Víctor Castro.
Sin embargo, el programa emblema del gobernador “Tu Bienestar Nos Une” y “Párale a la violencia” simplemente no han rendido frutos, pues mes con mes el semáforo sigue en rojo para las mujeres, en un contexto donde se dan lesiones dolosas, violación, narcomenudeo y violencia familiar.