Ricardo Iván Carpio Sánchez, fiscal general del Estado, reconoció que hubo omisiones por parte de dos ministerios públicos en el caso de tres menores víctimas de abuso por parte de su padre, razón por la que fueron suspendidos y una fiscal está en investigación.
Karla Aguilar Pastrana, madre de las menores afectadas, reclamó que las omisiones cometidas por los agentes llevaron a la liberación de Sam “N”, al menos de una de las tres carpetas de investigación.
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Aunque el sujeto fue reaprehendido en cuanto salió de prisión, por las otras dos investigaciones, la madre de las menores señaló que una de sus hijas ya no obtuvo justicia y tuvo que hacer el caso mediático, para que las autoridades hicieran su trabajo.
De acuerdo con información obtenida por ZETA, los agentes suspendidos fueron Héctor Orozco y Lourdes Pérez, aunque el fiscal general no especificó si de manera temporal o definitiva.
En entrevista con este Semanario, Carpio Sánchez dijo que sí hubo faltas por parte de los funcionarios a su cargo, que permitieron el sobreseimiento de la primera carpeta de investigación, pero que no permitiría que ocurriera con las otras dos restantes.
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“Sucedió una falta absoluta por parte de quienes estaban atendiendo el caso, por no haber presentado en tiempo y forma la acusación correspondiente, esto trajo como consecuencia una impunidad tajante…
“Los servidores públicos que estaban atendiendo de manera particular su caso, y quienes tenían la instrucción de atenderlo de forma diligente, fueron revisados sus actuares por parte de la Fiscalía de Visitaduría y el Órgano Interno y esta, a su vez, determinó la suspensión de ambos”, afirmó.
Sin embargo, Aguilar Pastrana también pidió la destitución de Adriana Lizárraga, fiscal de la Unidad de Violencia de Género, sin embargo, ante eso, Carpio Sánchez comentó que se está investigando su participación, aunque reconoció el trabajo realizado por ella y los logros obtenidos.
