20.4 C
Tijuana
sábado, octubre 5, 2024
Publicidad

Metamorfosis y migración

Entre realismo mágico, traumas e identidades híbridas que originan la mutación personal y espiritual, llega a la cartelera nacional “Hijo de monarcas”, película del biólogo Alexis Gambis filmada entre majestuosos bosques de mariposas monarca en Michoacán

Sumergido en metáforas sobre metamorfosis y migración, el cineasta franco-venezolano Alexis Gambis cuenta en “Hijo de monarcas” la historia de un biólogo mexicano radicado en Estados Unidos que retorna a Michoacán tras la muerte de su abuela, contexto que lo obliga a enfrentar traumas y reflexionar sobre su identidad híbrida.

Gestado como un filme ambientalista que explora la relación entre humanos y animales, en el que la mariposa es protagonista y un mosaico que representa ciencia, cultura y espiritualidad, la cinta debutará en salas de cine nacional el 25 de mayo.  Pretexto por el cual ZETA dialogó con Gambis.

“Quise abordar la migración cíclica, la idea de que tenemos varias raíces y pertenecemos a diferentes sitios al mismo tiempo, incluso biológicamente hablando. El personaje de Tenoch (Huerta) tiene esa búsqueda de la identidad genética. Filmamos en Angangueo, Michoacán y logramos una rica experiencia de docuficción con Noé Hernández, que la hace de hermano de Tenoch, y Lázaro Gabino, del amigo quien hace un ritual en complicidad con la comunidad. Fue mágico y reflexivo por el abordaje del tema del cambio climático que termina afectando la migración de las mariposas y su santuario”, precisó el realizador.

“Cuando retomó este tema me pongo en los pies de los animales, de cómo migran por sobrevivencia, pero a las mariposas les están deforestando su santuario. Migrar es parte de la vida, de soñar, y esa mariposa viaja 5 mil kilómetros desde Canadá por su ritmo biológico, y la migración tiene que ver con la diversidad, con mezclarnos”, abundó sobre la migración.

En referencia a cómo se gestó el filme estelarizado por Tenoch Huerta, Lázaro Gabino, Noé Hernández, Paulina Gaitán y Angélica Aragón, “mi principal interés es de la relación entre humanos y animales, en este caso por la mariposa monarca y lo que simboliza en términos de migración, también la parte científica, cultural, los rituales y Día de Muertos. Trato al cine como investigación, como algo que puede evolucionar. Viajé a Michoacán para entender las dinámicas, el pueblo, santuarios y el significado de la mariposa para ellos. Al final, ‘Hijo de monarcas’ es una cinta híbrida, cuyos actores se nutren con el pueblo y viceversa, como una simbiosis del ecosistema que se forma entre todos y la metamorfosis que se gesta cuando el público la palpa, percibe, y asimila, hablada en dos idiomas, con una mezcla de lenguajes y culturas”, apuntó el también biólogo.

Tenoch Huerta

“La película inicia con la muerte de la abuela, quien unificaba a la familia, entonces, ‘Hijo de monarcas’ relata ese regreso al pueblo desde Nueva York y la crisis existencial que enfrenta tratando de entender su identidad. En ese proceso de sueños y pesadillas, surgen los traumas de su infancia, y eso se mezcla con sus memorias. No me di cuenta, pero el personaje de Medel tiene mucho que ver conmigo y termina siendo medio biográfica en este sentido, un tipo de espejo”, confesó.

Con relación a su rodaje en Michoacán, “fui a hablar con la gente del pueblo sobre la película, interactué con los santuarios de mariposas, y entonces el lenguaje de la ciencia me permitió acercarme de forma diferente, para después inyectarle ficción, observar otras perspectivas, cómo la gente trabaja en minas, que tienen crisis económica. Este rodaje me deja muchas inquietudes, pero lo más importante es tener esperanza, porque siento que a veces hay un pesimismo y estamos en un estado donde pensamos que no podemos hacer nada, que todo es como cuestiones de cambio climático de la extinción de los animales”, expuso.

Llega a salas de cine

“Con mi cine me gusta vernos reflejados en los animales que están alrededor de nosotros, y ver desde el punto de vista de una mariposa monarca un poco la situación humana. Lo que me inquieta más que todo es entender que vivimos en un ecosistema donde todos los animales somos conectados y a veces estamos como separando esas conexiones, y siento que es algo que trato de hacer en mi cine y en mi activismo como biólogo, cineasta y creador: mostrar cómo en ese ecosistema todo se une”, concluyó el director, quien prepara dos rodajes: uno sobre un científico que ayuda a una comunidad indígena en la resurrección de un jaguar que murió en la selva; y otro sobre una criatura que vive en una laguna en Puebla, que es mitad pescado, mitad humano.

De esta manera, Alexis Gambis continúa su acercamiento al realismo mágico y la ciencia ficción.

Autor(a)

Roberto A. Partida Sandoval
Roberto A. Partida Sandoval
Licenciado en comunicación por la UABC. Periodista de entretenimiento. Editor de Espectáculos. 22 años en ZETA. Apasionado por el cine, música, viajes, gastronomía, ciclismo, senderismo y aventura.
- Publicidad -spot_img

Puede interesarte

-Publicidad -

Notas recientes

-Publicidad -

Destacadas