Un estilista de mascotas lleva más de dos meses intentando recuperar a dos perros que entregó a la Policía Ecológica de Ensenada tras una denuncia por maltrato animal interpuesta por el grupo de rescatistas de animales.
El 20 de marzo, la Policía Ecológica recibió una llamada de la asociación civil Los Adoptables, quienes tienen un albergue en el Kilómetro 5.5 de la carretera hacia La Bufadora, en el poblado de Maneadero.
Los activistas pidieron el apoyo para revisar a los canes del ciudadano Darryl Sanromán García Santillán en el domicilio Calle Normandía número 177, entre camino de Los Reyes del fraccionamiento Villas IV, porque se encontraban desnutridos, al parecer por una enfermedad por la cual un veterinario recomendó bajar el porcentaje de alimento.
Se trata de una perra de raza xoloitzcuintle de nombre Natasha, con un valor de entre 20 mil y 25 mil pesos en el mercado, y de un pitbull de nombre Killer, que, de acuerdo a la queja, fueron sacados de la casa con el consentimiento del propietario.
En Ensenada, la Fiscalía General del Estado (FGE) mantiene 83 denuncias abiertas por distintos delitos cometidos contra mascotas en 2022, mientras que en el año en curso, se han presentado dos.
La cifra es alta en comparación con otros municipios como Tijuana, con más de 2 millones de habitantes, donde los ciudadanos han interpuesto 94 denuncias en 2022 y 68 en el transcurso de 2023 por distintos casos de maltrato animal, incluyendo los rescatados durante cateos.
Aunque existe un serio problema de maltrato, animal con más de 300 casos denunciados en todo Baja California en el último año, recuperar a un animal una vez iniciado un proceso penal, no es un proceso sencillo.
DUEÑO DE PERROS ELEVA QUEJA A DENUNCIA PENAL
El abogado de Darryl Sanromán García Santillán, de apellido García, explicó que por autorización de su representado se llevaron a los perros para que los examinaran, con la condición de devolverlos una vez hecha valoración de salud, pero no cumplieron.
Por tal motivo, fue necesario elevar la queja a una denuncia ante la FGE, por el delito de Abuso de confianza. Reiteró que los animales estaban bajo tratamiento médico.
Darryl platicó que una de las integrantes de la asociación civil que se llevó a las mascotas era su conocida, había estado con él en eventos especiales y sabía de la situación de salud de los animales.
Contó que Killer es otro perro con historia. Se trata de un pitbull Stanford al cual rescató luego que un día lo persiguiera rumbo a la parada de transporte público. Para regresarlo a sus dueños publicó la imagen en redes sociales, pero nadie lo reclamó, entonces lo esterilizó y se lo quedó. “No lo pude dejar, se me hizo muy bonito, caminaba sólo al lado de mí, muy educado”, recordó.
A Natasha se la entregó un cliente de Tijuana, quien se comprometió con él a darle una cría de xoloitzcuintle; es dócil y está esterilizada desde los 4 meses de edad.
“La perra sólo tiene los cuatro de arriba y los cuatro de abajo con colmillos, es un defecto, pero esa es su complexión delgada, entre los 15 kilos marcados musculosos”, describió el hombre, quien se defiende de las acusaciones y lamenta no saber qué autoridad evalúa a las condiciones de “maltrato” en las mascotas para que le hayan quitado las suyas.
TEMAS DE MASCOTAS PUEDEN RESOLVERSE EN CONCILIACIÓN
El fiscal regional Rubén Alfredo Maximiliano Ramos Jiménez aseguró que el caso particular de Natasha y Killer, puede resolverse por medio de la conciliación para que las partes lleguen a un acuerdo.
Se trabaja de dos formas: cuando el Municipio recibe una llamada, verifican, hacen un Informe Policial Homologado y, si realmente el animal se encuentra en malas condiciones, lo transfieren a fiscalía.
Aclaró que una mascota en investigación debe estar en guarda y custodia de la fiscalía, no de una asociación civil.
“Muchas veces los dueños de los caninos no los entregan, y cuando lo hacen, lo llevan al juez calificador, quien aplica el reglamento y, en caso de que posteriormente le den vista por la presunción de un delito, iniciamos -la investigación- a cargo de nosotros”, detalló el funcionario.
También ha sucedido que la Policía Ecológica no da vista al Ministerio Público, y, aun así, interviene la unidad investigadora.
“El veterinario en la Perrera Municipal, efectivamente se encarga de realizar el análisis a la mascota en cuestión”, indicó el fiscal.
Recordó que solo hay una asociación civil en Ensenada que los apoya, y justo es Los Adoptables, quienes, a raíz de esta denuncia, han decidido retirar el apoyo. No obstante, en su Artículo 342, la Ley de Maltrato Animal en Baja California indica: “… los animales se canalizarán a los albergues municipales respectivos o a lugares adecuados para su debido cuidado. Así mismo se dará aviso inmediato a las asociaciones u organizaciones protectoras debidamente constituidas, las cuales podrá solicitar en cualquier momento al Ministerio Público o al juez de Control el resguardo temporal o definitivo del o los animales”.
El Centro de Atención Canina en Ensenada (CACE) informó que hay espacio suficiente para recibir mascotas que se encuentren bajo una investigación, e incluso tienen conocimiento del caso. El veterinario municipal revisó el estado de salud de Natasha y encontraron una enfermedad canina, por lo que fue necesario iniciar un tratamiento.
DENUNCIANTE SE QUEJÓ DE SERVIDORES PÚBLICOS ANTE SINDICATURA
El propietario de Killer y Natasha interpuso una queja ante el Sistema de Atención Ciudadana, a su vez, turnada a la Sindicatura Municipal a cargo de Elizabeth Muñoz Huerta, quien le notificó que su caso estaba en investigación con el número de folio SAC/0213/2.
De acuerdo con la denuncia, a las 10:00 horas del 20 de marzo, el propietario de los animales recibió un mensaje de texto en su celular, en el que una conocida identificada como Estrella, le informó sobre supuestas quejas por maltrato animal y que por ello recogerían a los canes.
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Tanto ella como una compañera de nombre Priscila, de la asociación civil Huellitas, ubicada en el poblado de Maneadero, solicitaron documentos para corroborar la información sobre el padecimiento de las mascotas.
Más tarde arribaron al domicilio Privada de Los Moros número 177, en el fraccionamiento de interés social Villas 4, a donde también llegaron tres elementos de la Policía Ecológica de la Dirección de Seguridad Pública Municipal.
La veterinaria de Natasha y de Killer estuvo presente en el proceso para informar sobre un problema de salud de los animales, razón por la cual estaban medicados con antidiarreicos, prebióticos y dieta blanda.
“Les enseñé el carnet de vacunación anual y que ambos están bien desde que se las apliqué en febrero, traté de explicar que los perros son de complexión delgada y están en tratamiento”, describió.
