Saúl Martínez Lira, titular del Juzgado Segundo de Distrito de Concursos Mercantiles, con residencia en la Ciudad de México, declaró, el 10 de abril de 2023, la quiebra de Interjet y ordenó poner a la venta todos los bienes de la aerolínea, para cubrir los adeudos con sus acreedores, que se estiman entre 25 mil y 40 mil millones de pesos, además de que instruyó también ratificar o nombrar a un nuevo síndico para liquidar los activos de la empresa.
“Con esta fecha se declara de plano el estado de quiebra a la comerciante ABC Aerolíneas S.A. de C.V. […] Se ordena al síndico que proceda a la enajenación de los bienes y derechos que integran la masa, en términos de los artículos 197 y siguientes de la Ley de Concursos Mercantiles, procurando obtener el mayor producto posible por su enajenación, a fin de hacer pago a los acreedores”, señaló el titular del Juzgado Segundo de Distrito de Concursos Mercantiles.
“Se ordena al síndico que de inmediato a partir de su designación, inicie las diligencias de ocupación, mediante inventario, de libros, papeles, documentos, medios electrónicos de almacenamiento y proceso de información, existencia en caja y todos los bienes de la comerciante”, indicó el juez federal.
En el fallo notificado el 10 de abril de 2023, el titular del Juzgado Segundo de Distrito de Concursos Mercantiles instruyó poner los bienes de la aerolínea a disposición del síndico que fuera nombrado, salvo los que estuvieran sujetos a ejecución de una sentencia judicial, para cumplir con obligaciones anteriores al concurso mercantil.
Martínez Lira ordenó al síndico, inscribir dicha sentencia en el Registro Público de la Propiedad y Comercio, mientras que a los deudores de Interjet les prohibió pagar o entregar bienes a la aerolínea, sin autorización del síndico, con apercibimiento de doble pago en caso de desobediencia.
“Las acciones promovidas y los juicios seguidos por la comerciante y las promovidas y los seguidos contra ella, que se encuentren en trámite al dictarse esta sentencia, que tengan un contenido patrimonial, no se acumularán al juicio concursal sino que se seguirán por el síndico”, agregó el juez federal.
El 30 de agosto de 2022, el mismo Martínez Lira declaró en concurso mercantil a Interjet y ordenó iniciar un proceso de conciliación para buscar un convenio con acreedores, ello 16 meses después de que el despacho Aguilar Amilpa Abogados presentó la demanda contra la aerolínea. Ante ello, el Gobierno Federal designó a Gerardo Sierra Arrazola, como conciliador en el procedimiento.
En ese entonces, el juez federal ordenó a la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) del Gobierno Federal, designar al conciliador respectivo, dentro de un plazo de 5 días hábiles. Martínez Lira también determinó suspender todos los actos de ejecución y cobro por parte de acreedores, de los cuales se desconocía su número y montos que se les debían.
Asimismo, mientras se designaba al conciliador, “los administradores, gerentes y dependientes de ABC Aerolíneas, Sociedad Anónima de Capital Variable [Interjet] tendrán las obligaciones de los depositarios respecto de los bienes y derechos que integran la masa”, indicó la sentencia del titular del Juzgado Segundo de Distrito de Concursos Mercantiles.
Sin embargo, dicha reestructuración no fue posible, por lo que el juez federal resolvió que, en tanto se ratificaba al conciliador Gerardo Sierra Arrazola, como síndico, quedaba suspendida la capacidad de ejercicio de la empresa sobre los bienes y derechos que integraban la masa concursal.
La empresa ABC Aerolíneas S.A. de C.V. -cuyo nombre comercial es Interjet- cesó operaciones el 11 de diciembre de 2020. Sin embargo, entró a una huelga y a un proceso de concurso mercantil promovido por su sindicato, desde enero del 2021.
A mediados de agosto de 2022, Carlos del Valle, director adjunto de Interjet -e hijo de Alejandro del Valle de la Vega- declaró que había un acuerdo para el pago en parcialidades de unos 250 millones de dólares que se deben en impuestos al Servicio de Administración Tributaria (SAT), y que había un “95 por ciento de avance” en acuerdos con proveedores y clientes que pagaron boletos, pero no pudieron volar.
En 2019, la deuda con el SAT, que en ese momento era de 690 millones de pesos, provocó la designación de una interventora con cargo a la caja de Interjet, lo que marcó el inicio del declive de la empresa, que arrastraba graves problemas financieros por una compra de aviones rusos que resultó un fracaso. Además, se tiene deuda con trabajadores que, misma que ascendía, según los sindicatos, a mil 800 mdp y tenía prioridad sobre cualquier otro pasivo, así como demandas de múltiples proveedores y aeropuertos en Estados Unidos y México.