Aproximadamente a las 20:00 horas del lunes 10 de abril, José Manuel Miranda Nieto “El Morro Pancho”, de 31 años, fue privado de su libertad en las calles Monterrey y Callejón de Acceso Tres de la colonia Ciudad del Cielo en La Paz.
Según testimonios, un comando armado arribó a la vivienda de la víctima, quien, al ver al grupo de sicarios, intentó correr, pero le dispararon en múltiples ocasiones; de inmediato lo subieron a la fuerza a un vehículo, para huir a toda velocidad.
Elementos de seguridad se entrevistaron con quien dijo ser Liliana “N”, identificándose como hermana de “El Morro Pancho”. La mujer reveló que su familiar fue sacado a la fuerza de la casa por tres hombres que portaban pistolas. En sus declaraciones indicó que el hombre fue sometido para enseguida subirlo a un auto, desconociendo qué tipo de unidad, ya que la obligaron a quedarse en el suelo, dentro de la casa.
Datos obtenidos por agentes de Investigación Criminal de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) refieren que hace unos meses, “El Morro Pancho” es de oficio panadero y ayudante de carpintero. Sin embargo, estiman que el levantón se debió a que revendía droga al menudeo en la zona de la Escuela Primaria “Agustín Arriola” de Ciudad del Cielo, en un punto conocido como “las escaleras”.
En octubre de 2022 ya había sido levantado por un comando armado y lo abandonaron sumamente golpeado. En esta ocasión, hasta el cierre de edición, seguía sin aparecer.
De acuerdo a colectivos de búsqueda de personas, en 2023 se tienen reportadas 64 personas como desaparecidas y no localizadas.
El mismo día que “El Morro Pancho” fue reportado como privado de su libertad, una persona más fue sustraída de un centro de rehabilitación por hombres armados. Se trata de José Manuel Miranda Nieto, cuya descripción física es tez morena clara, mide 1.70 metros de estatura y ojos grandes. Como seña particular tiene un tatuaje en la zona del pecho con la palabra “Julissa”, además de una cicatriz visible en mano izquierda.
A la par, Víctor Alfredo Espinoza Castro, de 34 años, fue visto por última vez en la colonia Guadalupe Victoria de la Capital de Sudcalifornia. Al momento de su desaparición vestía shorts negro con amarillo y camisa gris. Sus características físicas son: estatura de 1.80 metros, tez blanca y cabello castaño.
Según el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas de la Comisión Nacional de Búsqueda, entre el 10 de septiembre de 2021 y el 18 de abril de 2023 se sumaron 212 personas cuyo destino aún se desconoce: 106 desaparecieron en La Paz, siendo estos 87 hombres y 19 mujeres; 90 reportes en Los Cabos, 65 del sexo masculino y 25 del femenino; seis desaparecidos en Comondú, cinco hombres y una mujer; cuatro hombres desaparecidos en Mulegé y cuatro Loreto, una mujer y tres hombres. Del total, 77.83% son hombres y 22.17% son mujeres.
LAS CIFRAS OFICIALES
La Comisión Nacional de Búsqueda da cuenta que en los primeros meses de gobierno de Víctor Manuel Castro Cosío desaparecieron 25 personas; en 2022 se contabilizaron 120 desaparecidos y no localizados; mientras que en el transcurso del año, ha habido 62 personas desaparecidas.
Esto refleja en promedio que durante 2022 se perdieron diez personas al mes, mientras que, en lo que va del año, un promedio de 15.5 personas desaparecidas por mes.
Las cifras del Colectivo Búsqueda por La Paz no están alejadas de los números oficiales. La Comisión de Búsqueda registra 62 desapariciones, mientras que la organización ciudadana cuenta con 64 fichas de desaparición.
Ante estos hechos, los colectivos invitan a la población a sumarse en las búsquedas. Colectivo Búsqueda por La Paz organizó una salida a campo por la zona de Playa El Saltito para atender algunas denuncias anónimas y descartar la presencia de cuerpos enterrados.
“Que se unan a las búsquedas. aunque no tengan un desaparecido, como voluntarios, porque ocupamos muchas manos, tenemos mucho terreno que recorrer y la cifra va aumentando y es muy grande el terreno de Baja California Sur para las familias”, dijo Álvarez Manríquez.
La agrupación se alista para que a finales de 2023 se lleve a cabo una búsqueda masiva integral de personas, con la colaboración de la PGJE, Comisión de Búsqueda y sobre todo con la ayuda del equipo de búsqueda y los perros entrenados en la localización de cuerpos.
“El 27 de abril va a haber una jornada integral para que las familias se acerquen a hacerse sus pruebas de ADN en el Instituto de Ciencias Penales a las nueve de la mañana, o igual pueden acudir a la fiscalía para dejar sus pruebas del ADN, porque es muy importante que esos cuerpos se identifiquen para que no se vayan a fosas comunes”, expresó el representante del Colectivo.
LOS HALLAZGOS
Apenas el 4 de marzo, “Lucio”, un perro de raza pastor belga entrenado para la localización de restos humanos en la PGJE, efectuó la localización de dos fosas clandestinas en Playa El Saltito. Los colectivos regresaron a la zona en busca de más personas enterradas.
Fuentes revelaron a ZETA que esta zona ha sido un punto de mayor presencia de criminales, donde no sólo han enterrado a sus víctimas, sino que las han arrojado en los últimos cinco años. Justamente los llamados anónimos al colectivo señalan la zona como un cementerio clandestino.
“Esa zona la tenemos como punto rojo en el Colectivo de Búsqueda por La Paz, ya que en varias ocasiones se han localizado fosas clandestinas o cuerpos tirados en brechas, hemos hecho más intensas las búsquedas en esa zona, desde donde empiezan las primeras antenas, viendo a la Playa El Saltito hasta la playa”, comentó el activista Daniel Álvarez.
A pesar de los trabajos de localización, como en Playa El Saltito, los esfuerzos han sido en vano, ya que los restos localizados no han podido ser identificados por falta de muestras o porque los laboratorios forenses no han brindado los resultados esperados por familiares.
En Los Cabos, colectivos de búsqueda informaron que los puntos donde más se han denunciado cuerpos enterrados, son detrás de una pista de aterrizaje en Cabo San Lucas y a la salida de esa localidad, justo atrás de la sede de la PGJE.
“Hemos recibido muchas llamadas anónimas para la zona de Cabo San Lucas, cerca de la pista de aviones que está por ahí, por donde está la Procuraduría de Cabo San Lucas. Es muy importante que las familias se acerquen a hacerse sus pruebas de ADN, ya que hemos localizado muchísimos cuerpos y osamentas en el Estado, y muchos de ellos están sin identificar”, puntualizó el representante de Búsquedas por La Paz.