El General Brigadier José Silvestre Urzúa Padilla fue abatido desde un árbol por los disparos de un sólo agresor, quien también hirió a otros cuatro elementos de la Guardia Nacional. El atacante falleció en el lugar luego de ser alcanzado por una granada, informó la Fiscalía General del Estado (FGE) de Zacatecas.
De acuerdo con lo descrito por el Fiscal Francisco Murillo, Urzúa Padilla persiguió a pie, junto a tres elementos más, a un sospechoso armado por brechas en El Jaltomate. A raíz de lo anterior, el hombre optó por subir a un árbol, desde donde disparó a los uniformados en un ataque que culminó con la tragedia.
“Por esas brechas, él se traslada hacia allá en búsqueda de ellos y es cuando nuevamente se presenta una nueva agresión a él, a su personal y se acude en apoyo, en esta acción lamentablemente pierde la vida”, expuso el Fiscal.
La Secretaría de Seguridad Pública estatal continuó con los operativos en Pinos, Zacatecas. A la entidad también arribaron más de 500 militares de fuerzas especiales del Estado de México y Jalisco luego del asesinato del coordinador estatal de la GN, así como la detención de tres policías por el delito de secuestro agravado.
Los detenidos “fungían como policías y fueron detenidos el día de ayer. Sus nombres son Arturo, Emmanuel y Tomás, tres masculinos a los que se les cumplimentan una orden de aprehensión por el delito de secuestro agravado. Es un tema donde hay víctimas que los señalan en este delito en particular”, detalló Francisco Murillo.
La tarde de ayer se llevó a cabo un homenaje de cuerpo presente en las instalaciones de la Zona Militar número 11 donde el Gobernador del estado, David Monreal, declaró que “hoy más que nunca debemos seguir apegándonos a la Estrategia Nacional de Seguridad y cerrar filas con nuestras Fuerzas Armadas”.
Por la noche, el cuerpo del General Brigadier fue trasladado a la capital del país, donde el Secretario de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval González, presidió junto a la secretaria de Seguridad Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, otra ceremonia de honores fúnebres, en las instalaciones del velatorio militar.
Entre redobles de tambores y gritos de “¡Misión cumplida, mi General!”, Urzúa Padilla fue despedido por elementos de las dos instituciones en un homenaje que incluyó el retiro de bandera del féretro para entregarla a la familia del General
Envuelto por una nueva bandera, el jefe de la Guardia Nacional zacatecana desfiló por última vez frente a las tropas presentes para dirigirse a su lugar de descanso. ZETA/SinEmbargo