La subgobernadora del Banco de México (Banxico), Galia Borja, advirtió que el banco central no ha dado señales de que terminará el ciclo de alzas de la tasa de interés, luego que la semana pasada, la institución incrementó 75 puntos base su tasa de referencia, ubicándola en un máximo histórico de 10%
Con el incremento de noviembre, Banxico acumula 12 alzas desde junio de 2021, cuando inició el actual ciclo alista, que también es el más largo. En las últimas cuatro alzas se ha buscado llevar la tasa de interés a un “terreno restrictivo”, con el fin de que la inflación converja al objetivo del banco central en el primer trimestre de 2024. (3% +/- un punto porcentual).
Al participar en el Foro de Mercado de Capitales de México, organizado por Bloomberg, Borja aseguró que las decisiones del Banxico “no son mecánicas” respecto a las de la Reserva Federal de Estados Unidos (FED, por sus siglas en inglés), sino que se consideran las condiciones cíclicas de la economía mexicana.
Banxico inició el ciclo alcista antes que la FED, y consideró que antes de desligar las decisiones de política monetaria, es necesario tener datos más positivos sobre la inflación.
En ese sentido, si bien la inflación general ya comenzó a desacelerarse, la subyacente (que excluye a productos y servicios con precios más volátiles) mantiene una aceleración importante “por la tendencia creciente que siguen mostrando las presiones de alimentos, bebidas y tabaco”, destacó la funcionaria.
Se estima que la inflación general se sitúe en 8.3% al cierre de 2022. En tanto, las expectativas de la inflación de entre uno y cinco años se mantienen por encima del objetivo del Banxico, y las de mayor plazo se ubican “en sus niveles más altos en los últimos diez años”, agregó Galia Borja.
Por otro lado, la apreciación del peso respecto al dólar estadounidense se debe a la independencia del Banxico y su política monetaria “prudente y oportuna”, así como un balance fiscal responsable y un nivel suficiente de reservas federales, entre otros aspectos macroeconómicos del país.
Sin embargo, algunos especialistas económicos han considerado que la cotización del billete verde se debe a la caída del dólar ante la expectativa de que la FED no incremente tan agresivamente las tasas de interés como en los anteriores anuncios de política monetaria. Hasta el 11 de noviembre, el peso se había apreciado 1.46% en lo que va del mes, al ubicarse en 19.53 pesos por dólar, según el Centro de Estudios de las Finanzas Públicas (CEFP). El lunes 14, el billete verde cerró la jornada cambiaria en 19.35 pesos; 18 centavos menos que el cierre previo.