Comando armado golpea brutalmente a agentes municipales en Comondú, a sólo unos metros de Palacio Municipal. De 15 sujetos sospechosos de la agresión, sólo hay tres detenidos
La noche del domingo 25 de septiembre se evidenció la impunidad con que operan las células criminales en Baja California Sur. A las 21:08 horas, el Comandante General de la Policía Municipal de Comondú, Gabriel González Hernández; el Comandante Supervisor de la Municipal, Romualdo Salvador Geraldo Amador; así como un policía identificado como Alberto Gómez Torres, atendieron un llamado por disturbios en un bar del Centro de Ciudad Constitución, protagonizado “por al menos 15 masculinos con armas cortas y largas”, según el parte oficial.
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Sin embargo, fueron recibidos a balazos, aparentemente al aire, en el bar Michelatos, de donde salió un comando empuñando armas largas y cortas preguntando “si había algún problema”. Entre ellos se encontraban dos mujeres. Después, los agentes fueron golpeados brutalmente, mientras se escuchaban los gritos “¡No me vuelvas a faltar al respeto” y posteriormente “¡Vámonos, vámonos!”.
En el video que tomaron testigos, se aprecia a los civiles armados retirándose del lugar, tal escena de película, apuntando a los uniformados con las armas. Luego vino “una pinche desmadre ahí, es una pinche cantina esa madre, pues”.
Los tres elementos fueron enviados al hospital y del grupo armado ya no se supo más. Reportan los oficiales de apoyo que “las personas armadas se retiraron del lugar, se desconoce las unidades en las que iban a bordo, las personas agresoras andaban de civiles sin rostro tapado”.
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A menos de una hora del atentado contra los agentes municipales, ya circulaba un video grabado con celular del ataque armado, pero la autoridad guardó silencio. Fue hasta la mañana siguiente que en reunión de la Mesa de Seguridad en Palacio de Gobierno enteraron al gobernador Víctor Manuel Castro Cosío, gracias al video filtrado que obligó a un operativo conjunto para “detener a los implicados”. Para entonces ya habían transcurrido dos días.
Mientras la oficial que resguardaba el bar ubicado contra esquina del Palacio Municipal de Comondú reportó 15 masculinos armados con armas largas y cortas, “personas con actitudes sospechosas y alterando el orden en Bar Michelatos”, desplegando un fuerte operativo por el cual se logró la detención de sólo tres masculinos, faltando seis más y dos mujeres, reportó la autoridad.
“Iniciaron la búsqueda, que derivó en la ubicación y detención de tres hombres originarios de los estados de Sinaloa, Michoacán y de Comondú. Se continúa con las investigaciones para la identificación y localización de aproximadamente seis hombres y dos mujeres relacionados en los hechos”, indicó la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE).
En el operativo no hubo personas lesionadas o fallecidas, además de que fueron puestos a disposición por la agresión a policías y posesión de narcóticos.
CACERÍA DE BRUJAS
La mañana del martes 27 de septiembre, se montó un operativo especial desde La Paz, con la única encomienda de detener a los presuntos agresores.
La fuerza policiaca comundeña fue acuerpada por la Mesa de Seguridad en Baja California Sur, con apoyo de Secretaría de Marina, de la Defensa Nacional, agentes de Investigación Criminal de la PGJE y Policía Estatal.
“Este tema debe ser tratado con pincitas, no queremos que se desate una guerra. Primero está nuestra gente, van a caer todos”, refieren fue el mensaje enviado a elementos de seguridad de todas las corporaciones el lunes 26.
Y es que tras la golpiza que recibieron tres elementos de la Policía Municipal de Comondú a las afueras del bar ubicado en el Centro de Ciudad Constitución, por el comando armado, los mandos de Seguridad Pública convocaron a todos los agentes disponibles.
“Los armaron con uñas y dientes y el mismo lunes los enviaron a buscar a los responsables, esa fue la encomienda desde la Dirección de Seguridad Pública, Policía Preventiva y Tránsito Municipal de Comondú”, señalaron familiares de policías.
Además, se filtró un audio compartido en grupos de policías municipales de Ciudad Constitución, en el que detallan acerca de la golpiza recibida:
“Golpearon al Comandante General, güey, Gabriel González; golpearon a Salvador Romualdo, Comandante Supervisor; y golpearon a un chalancito de Alexis, un morro de La Toba; al Comandante General le destrozaron la cara a cachazos y al Supervisor le tumbaron los dientes a cachazos, y al otro bato le dieron una verguiza, están internados en el ISSSTE”, expresa la voz, aparentemente un servidor público municipal.
Pese a ocurrido el atentado a 50 metros del Ayuntamiento de Comondú, la institución, la Dirección de Seguridad Pública y la alcaldesa Iliana Talamantes guardaron silencio.
De no ser por los oficiales de Seguridad Pública que compartieron el estado de la situación, la ciudadanía no se hubiera enterado.
“Ahorita convocaron a una junta ahí en Seguridad Pública (Municipal), güey, están citando a todo el personal de Seguridad Pública, güey, los están armando hasta el culo y están de cacería de brujas a la verga, y órdenes de pegarle una santa verguiza y para arriba a todos, güey, órdenes del Capitán”, confirmaron servidores públicos de Comondú.
Tan hermético fue el asunto, y sabido por todos los habitantes, que muchos profesores solicitaron a padres de familia no enviar a sus hijos, al desconocer la situación en que se encontraba la seguridad, ya que veían pasar unidades de emergencia a exceso de velocidad sin que se les informara.
EL INICIO DE LA GUERRA
Hay indicios de que algo grande está por ocurrir, y lamentablemente el epicentro es Comondú. Desde la denuncia de cobro de piso en Puerto San Carlos y la presencia de miembros de la delincuencia organizada que controla la pesca, alcohol y demás, la situación ha ido empeorando para sus habitantes.
El mismo domingo de la golpiza a agentes municipales, aproximadamente a las 07:44 horas se reportó el hallazgo del cuerpo de un hombre sin vida, cuyos restos fueron abandonados en el tramo carretero de Ciudad Insurgentes-Zaragoza, pasando “La Virgencita”.
Presentaba lesiones en brazos y nuca, provocadas por proyectiles de arma de fuego; también se localizaron por lo menos cinco cartuchos percutidos. Sobre este caso se aperturó la carpeta INS/162/2022.
Junto al cadáver del masculino, quien vestía playera color gris y negro, pantalón de mezclilla azul y botas de trabajo color beige, se localizaron:
– Cinco casquillos percutido color dorado, calibre .40
– Pañuelo de color azul sobre la tierra
– Huella de neumáticos de vehículo
– Bala semi-deformada con encamisado color cobrizo.
El mismo día, agentes de Investigación Criminal apoyados por un helicóptero de la Secretaría de Marina, lograron la ubicación y detención de uno de los presuntos implicados en San Carlos; sin embargo, se confirmó que fueron liberados horas más tarde.
“Es muy probable que debido al incidente de esa tarde en Puerto San Carlos, los criminales hayan tomado partida y actuado de tal forma en el Michelatos”, confió a ZETA un oficial.
Tras la tensa noche en Comondú, en la que fueron lesionados a golpes tres oficiales y por dos días se realizara un nuevo operativo y la detención de tres individuos, Daniel de la Rosa Anaya, titular de la PGJE, confirmó:
“Se logró la detención de tres personas de sexo masculino, uno originario en Michoacán, otro de Sinaloa y otro de ahí de Comondú, estas tres personas fueron aseguradas en flagrancia delictiva con diversas armas de fuego, son cuatro armas de fuego largas, calibre .223 y 5.56, y otras calibre 9 milímetros tres armas de fuego; en total, siete armas aseguradas. Droga que se les encontró también algunos de ellos, entre otras cosas, cargadores y diversos proyectiles, también de diversos calibres”.
Las tres personas, presuntos participantes en la golpiza, fueron puestas a disposición del Agente del Ministerio Público. Serán llevados ante la justicia federal por la portación de armamento de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas.
“Dentro de la investigación se estará esclareciendo totalmente el hecho, para que no haya impunidad. Que quede plenamente acreditada la presunta responsabilidad de quienes son los participantes de estos eventos, y de este evento en particular del día domingo, sobre todo que la sociedad sepa que ya hay detenciones relevantes, que se estará desarticulando este grupo delictivo que realizó esa acción ilegal el día el día domingo”, apuntó el procurador De la Rosa Anaya.
SECRETO A VOCES
Según la PGJE, con la caída de tres de 15 individuos reportados, además de dos mujeres que se ven en la grabación, estarían desarticulando a esta peligrosa célula criminal que venía desarrollando actividades ilegales y alterando el orden público.
Para los comundeños no es un secreto la presencia de grupos criminales, camionetas con personas armadas o inclusive hombres armados en bares y centros nocturnos de Ciudad Constitución y sus alrededores, sólo para las autoridades era de desconocimiento, “ellos eran los únicos que caminaban con los ojos cerrados, a todas luces, y le puedes preguntar a cualquiera del pueblo: la gente armada andaba por todos lados, como vil rancho con su rifle a la vista, y los policías son los responsables, sólo pasaban y agachaban la mirada”, señalaron familiares de policías.
Temen por la vida de sus allegados que todos los días exponen su vida, a veces soportan insultos de “esa gente”, pero ya están cansados, su vida está en riesgo.
Pese a la cercanía del bar con Palacio Municipal, la autoridad claramente ha brindado complacencia y permitido la presencia de rifles de asalto y pistolas, como si fueran un objeto cualquiera.
“Si La Paz es chica, imagínate aquí, casi todos son familia y se conocen. Cómo no temer si la misma autoridad lo solapa, el día que sometieron y golpearon a policías de Constitución, los maleantes, que eran de 12 a 15, estaban de fiesta en el bar Michelatos en pleno Bulevar Agustín Olachea, frente a Palacio Municipal. Si a ese nivel de impunidad llegan, no me imagino de todos aquellos que nos atrevamos a denunciar la presencia de gente armada”, externaron a ZETA los consternados consanguíneos.
No es la primera vez que los habitantes denuncian la presencia de hombres agresivos portando armas, incluso mencionan que llegan a diferentes comercios a consumir a plena luz del día y no son molestados, con la preocupación de que podría desatarse un periodo complicado para los ciudadanos y la Policía.
“Hace algunos meses cerraron el bar, tenían fiesta, y es de cada rato que se ponen bravos y se arman los trancazos, uno de tantos disturbios que llegan los policías, pues andaban muy enojados y les dieron con todo a los policías. Los agentes se sintieron fuertes porque andaba el Comandante General inspeccionando el llamado, y fue a uno de los que peor le fue, cachazos y de todo un poco”, concluyó el denunciante.
El primero en evidenciar a células criminales en Comondú fue el Obispo Miguel Ángel Alba Díaz. Hoy, fue un ciudadano que grabó el incidente. Ahora le falta a la Mesa de Seguridad brindar una verdadera respuesta a los habitantes.
