El secretario de Seguridad y Protección Ciudadana del XXIV Ayuntamiento de Tijuana, Fernando Sánchez González, reconoció que el presupuesto para la prevención del delito no es suficiente y refirió que ante el recorte de uno de los fondos federales para el rubro de seguridad se debe “generar estrategias y acciones” que no demanden el ejercicio de recursos en el ánimo de prevenir los actos delictivos.
“Tenemos personal capacitado y certificado en la Dirección de Prevención del Delito que no tenemos que pagarle por las acciones que realizan porque son personal de la propia secretaría”, refirió a ZETA.
Sostuvo que resulta prioritario procurar programas como DARE (para prevenir el consumo de drogas), Policía Juvenil, Mujer Segura en un afán de que personal de la Secretaría capacite y atienda “a los sectores de la sociedad” para que conozcan las acciones que ejecuta la dependencia municipal.
“Eso afortunadamente no nos cuesta, entonces tenemos que ser creativos, quisiéramos tener más presupuesto, quisiéramos tener la posibilidad de desarrollar más programas, pero hasta donde nos alcanza el presupuesto y lo demás tiene que ser con creatividad”, expresó.
Desde 2020 en el proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación 2021 quedó eliminado el Programa de Fortalecimiento para la Seguridad (Fortaseg), el cual estaba destinado a fortalecer el combate a la inseguridad en los municipios.
El 19 de septiembre, el presidente del Consejo Ciudadano de Seguridad Pública de Baja California, Roberto Quijano Sosa, señaló que el presupuesto etiquetado para la Dirección de Prevención del Delito en Tijuana era mínimo, con un monto de 800 mil pesos aproximadamente, “equivalente como a 70 mil pesos al mes”. De ahí que dijera no entender “el orden de las prioridades”, en razón de que a su modo de ver la SSPC debería prevenir en primer término la comisión de actos delictivos. A pregunta expresa, Sánchez González se abstuvo de indicar si para 2023 el presupuesto destinado a ese rubro aumentará en el municipio fronterizo
