En el curso de los Diálogos por México, celebrados por el Partido Revolucionario Institucional los días 17 y 18 de octubre, el dirigente de ese instituto político, Alejandro Moreno Cárdenas, se pronunció porque esas jornadas fueran el punto de partida para erigir un proyecto que una a todas las fuerzas de oposición.
“Alito”, cuyo aval a la iniciativa de prolongar la participación del Ejército en tareas de seguridad pública ocasionó que se suspendiera la alianza Va por México (PAN-PRI-PRD), aseguró que los Diálogos por México habrían de constituir “una bocanada de aire fresco en el debate público, nublado por la eterna manipulación del Ejecutivo federal”.
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En el segundo día de actividades, la ex secretaria de Relaciones Exteriores, Claudia Ruiz Massieu, afirmó que “es tiempo de definiciones” y de “valientes”. Se dijo “lista para servir a México” y que, para enfrentar a Morena, el PRI debe hacerse de humildad y sensatez en el ánimo de recuperar la confianza ciudadana.
Expresó que los problemas del partido son “una responsabilidad compartida”. No obstante, la dirigencia nacional debe renovarse, y aclaró que ese parecer ya se lo hizo saber a Moreno Cárdenas.
Al igual que Ruiz Massieu, el gobernador de Coahuila, Miguel Ángel Riquelme; el ex secretario de Turismo, Enrique de la Madrid; el mandatario de Durango, Esteban Villegas; su homólogo de Oaxaca, Alejandro Murat; la senadora Beatriz Paredes; el ex secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), José Ángel Gurría y el diputado federal Ildefonso Guajardo, expusieron propuestas a favor del desarrollo del país.
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Pronunciamientos en pro de la unidad del priismo o de la reconfiguración de una alianza fueron reiterativos en las jornadas celebradas en la sede nacional del PRI. Los Diálogos por México tuvieron lugar semanas después que el Partido Acción Nacional celebrara un Foro Ciudadano con sus propios presidenciables. (Eduardo Andrade Uribe)
