El primer caso ocurrió en el fraccionamiento Villas del Rey y se presume como responsable al novio de la víctima; mientras que el segundo cuerpo se localizó al interior del canal Tulichek.
Entre el lunes 26 de septiembre y martes 27, dos mujeres fueron asesinadas en Mexicali. Ambos casos cuentan con elementos para ser considerados feminicidios y en los dos se utilizaron armas punzocortantes para perpetrar el hecho delictivo.
Según la información proporcionada por autoridades locales, ambos hechos ocurrieron durante la tarde y al Sur de la ciudad, pero no se considera que pudieran estar relacionados.
El primero de ellos se dio a conocer cuando un hombre arribó a su vivienda localizada en el fraccionamiento Villas del Rey, con una bolsa con ropa ensangrentada,
Dicho individuo de nombre Enrique ingresó a la vivienda, tomó una maleta y se retiró con rumbo a la central camionera de Mexicali, lo que generó sospechas en sus propios familiares, quienes solicitaron la intervención de la Policía Municipal.
Tras explicarles la situación, elementos municipales acudieron al domicilio de la pareja sentimental del individuo ubicada sobre la calle Ballestas, en la colonia Los Juglares, donde confirmaron que dentro del domicilio yacía el cadáver de una mujer que presentaba varias heridas provocadas por arma blanca.
Al día siguiente, elementos de la Policía Municipal atendieron otra emergencia donde también se implicaba a una mujer.
Agentes preventivos acudieron a los alrededores del canal Tulichek, , donde observaron una figura humanoide envuelta en una cobija, por lo que iniciaron el operativo para rescatar el cuerpo del agua e iniciar con las indagatorias.
La fémina no fue identificada pero se indicó que se encontraba maniatada con una cuerda, además de presentar heridas producidas por arma blanca, por lo que se presume que podría ser la causa de la muerte.
Los restos de la hoy occisa estaban envueltos en una cobija color azul y con una malla ciclónica; dos bloques fueron ubicados encima de sus restosLos restos de la hoy occisa estaban envueltos en una cobija color azul y con una malla ciclónica; dos bloques fueron ubicados encima de sus restos