Determinaron que existen algunas irregularidades e inconsistencias que los hicieron tomar la decisión de suspender el contrato para la construcción de una planta fotovoltaica
Por incumplimiento de contrato al no conseguir los permisos federales para la generación de energía, la administración del alcalde, Luis Donaldo Colosio Rojas, en Monterrey, Nuevo León, canceló el contrató que firmó su antecesor priísta, Adrián Garza, para la generación de energía por parte de la empresa Next Energy.
El consorcio dirigido por el magnate José “Pepe” Maíz, y su familia, signó un contrato de más de 7 mil millones de pesos con el gobierno de Monterrey, cuando era dirigido por el priista Adrián Garza, en el año 2020, mismo que no se materializó debido a que se comprometió a vender energía eléctrica a partir del mes de febrero del 2022, pero la falta de permisos impidió se concretara el anunció.
Ante esta situación, el Presidente Municipal emanado de Movimiento Ciudadano, determinó rescindir el contrato y sólo asumir los costos del predio que se había otorgado en favor de la empresa para construir el Parque Solar Las Palapas I, el cual costaría más de 7 mil millones de pesos a pagarse en 30 años.
Cabe señalar que por este mismo motivo, el gobierno de Marina del Pilar Ávila Olmeda, ordenó la cancelación del contrato con la empresa Next Energy, para la generación de energía fotovoltaica para abastecer el acueducto Río Colorado-Tijuana, que dota de recurso hídrico a la Zona Costa del Estado.
Por dicho contrato, el ex mandatario estatal, Jaime Bonilla Valdez, se encuentra bajo proceso judicial y citado el próximo 15 de agosto para una audiencia de formulación de imputación, junto con varios funcionarios de la administración pasada.
Según el secretario de Hacienda, Marco Antonio Moreno Mexía, el contrato fue firmado con la intención de que el Poder Ejecutivo se obligara a pagar 12 mil millones de pesos en caso de cancelar el contrato, y exculpaba a la empresa de cualquier responsabilidad por incumplir el acuerdo, pero finalmente se determinó una anulación del contrato en medio de un acuerdo de secrecía que permanece a la fecha.