Tras el fallo de la Suprema Corte, con el cual el aborto ya no tiene protección constitucional, validando prohibiciones que habían sido impuestas por el caso Roe vs. Wade -que argumenta que el derecho a elegir es un derecho constitucional-, será responsabilidad de los estados determinar la legalidad de este procedimiento de salud reproductiva.
A la fecha, las entidades en donde la práctica del aborto sigue siendo legal son: Washington, Oregon, California, Nevada, Colorado, Nuevo México, Alaska, Hawái, Nueva Jersey, Maine, Minnesota, Illinois, Nueva York, Vermont, Nuevo Hampshire, Massachusetts, Connecticut, Maryland, Delaware, Rhode Island, y Maine.
Esto significa que la mayoría de las entidades sureñas y del medio oeste ya prohibieron o están a punto de restringir estos procedimientos médicos, activando las llamadas “leyes gatillo” en cuanto la legislación federal dejara de garantizar esta práctica.
El miércoles, la Asamblea de California aprobó una enmienda histórica para hacer explícito el derecho fundamental al aborto y los anticonceptivos, dando un paso para convertirse en un estado santuario para quienes busquen interrumpir un embarazo.
Afiliados en California de Planned Parenthood y NARAL Pro-Choice California fueron los principales patrocinadores de la iniciativa SCA 10, que sumó 58 votos a favor y 16 en contra en la sesión legislativa del miércoles 29 de junio. Así, la medida aparecerá en la boleta electoral de noviembre en donde el electorado tendrá la oportunidad de decidir si la protección al aborto queda inscrita en la constitución del estado.
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Cuatro años antes de Roe vs. Wade, la Suprema Corte de California sostuvo que los californianos tienen el derecho constitucional de decidir su procreación. En 1972 se sumó una enmienda para explícitamente proveer el derecho a la privacidad.
El presupuesto operativo de California contempla 20 millones de dólares destinados a un “Fondo de Apoyo Práctico al Aborto” para cubrir gastos como boletos de avión, hospedaje, gasolina y comida de quienes residen en el estado y desean realizarse dicho procedimiento reproductivo. A su vez, se destinan 40 millones de dólares para cubrir abortos en caso de que las mujeres no puedan pagarlos.
