El Instituto recibió un pasivo de 400 millones de pesos de la administración de Jaime Bonilla Valdez, según la subdirectora del hospital. Aunque han abonado a la deuda, proveedores de medicinas se muestran desconfiados y no surten lo suficiente
Pacientes del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Gobierno y Municipios del Estado de Baja California (Issstecali) con padecimientos crónico-degenerativos e incluso cáncer, son canalizados a farmacias privadas ante la falta de medicinas que enfrenta.
Alrededor de los hospitales de la institución, hay farmacias privadas que venden los productos hasta siete veces más caros, pues aprovechan la escasez que se ha convertido en un problema regional.
Autoridades estatales reconocen el problema económico generado por esta situación; en respuesta, a nivel nacional han surgido organizaciones de la sociedad civil para denunciar el conflicto.
La deuda que recibió en este rubro la gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda por parte de su antecesor, Jaime Bonilla Valdez, es superior a 400 millones de pesos.
Con abonos han cubierto alrededor de un 80 por ciento de ese déficit y faltan alrededor de 60 millones de pesos, según cifras hasta junio de 2022 entregadas por la administración de Issstecali.
El 1 de junio, Ávila Olmeda realizó una gira de trabajo a Ensenada, donde se le cuestionó sobre el desabasto de medicamento; aseguró que las farmacias estaban bien surtidas.
“La información que tenemos es que no existe desabasto, hay medicamento suficiente y seguimos comprando conforme vaya la necesidad”, indicaría la mandataria estatal.
Un empleado de la Fiscalía General del Estado (FGE), quien reservó su identidad, compartió con ZETA que desde hace tiempo gasta mil pesos mensuales en una farmacia particular para adquirir medicamento contra la diabetes.
Cada semana acude a Issstecali con el propósito de conseguir la medicina y evitar gastar su sueldo, pues tardan varios días en reembolsar el costo. Agregó que la institución tampoco cuenta con fármacos para la presión.
En una visita de ZETA a la farmacia de Issstecali, se constató cómo los anaqueles están a menos del 50% de la capacidad de surtido, aunado a que derechohabientes consultados en el hospital coincidieron en el problema de desabasto.
“Tengo dos meses que no me dan el medicamento, en farmacia se limitan a decir que no ha llegado, sin darte fecha, y tengo que estar yendo a preguntar. Aunque existe un reembolso, el trámite es engorroso” explicó una de las afectadas.
El médico de la farmacia manda al enfermo a Consulta Externa, donde le firman una receta; después, debe regresar a la farmacia, donde el personal recibe dicho papel y otorga uno nuevo con una solicitud de reembolso.
De acuerdo con el calendario, todos los martes pagan en la institución, siempre y cuando sea presentada la factura con los datos exactos, aclararon los empleados de gobierno afectados.
PROVEEDORES DESCONFIADOS
Guadalupe Angélica Pon Méndez, subdirectora general médica, reconoce el problema de desabasto en los medicamentos de mayor demanda.
La funcionaria lamentó y consideró alarmante que los distribuidores le vendan al Gobierno del Estado el Paracetamol a 10 pesos, pero en las farmacias afuera del hospital se oferta hasta en 70 pesos.
Pon Méndez afirmó que la afectación en el surtido es consecuencia del adeudo de más de 400 millones de pesos: “Hemos dado abonos para que vuelvan a surtir, sobre todo el medicamento de alta especialidad. Y aunque no hemos liquidado, sí hemos abonado un buen porcentaje”.
De acuerdo con la estadística del hospital, hasta junio de 2022 hay registro de aproximadamente 23 mil personas diabéticas o con alguna enfermedad crónico-degenerativa en los seis municipios de BC. De ese total de enfermos que requieren medicamento de alta especialidad, al menos 3 mil son atendidos en el puerto de Ensenada, es decir, el 16% del total a nivel estatal.
La subdirectora general médica señaló que además de los diabéticos, los tratamientos oncológicos son parte de las preocupaciones desde que inició este gobierno.
Los medicamentos que escasean, son de última actualización o combinados, como el caso de la Metformina (para el control de azúcar en la sangre) con Sitagliptina.
Pon Méndez aseguró que, aunque los estantes no están llenos, las farmacias de Issstecali se encuentran a 85% de su capacidad. Sobre el procedimiento de reembolso, elogió dicha estrategia al ser la única en el país, para no dejar al paciente sin la medicina.
“Recibimos la solicitud cuando el medicamento no se encuentra disponible, (los pacientes) sólo hacen el trámite de reembolso, llevan la receta médica y posteriormente la factura para entregar el efectivo”, dijo.
Si el costo del medicamento es menor a 3 mil pesos, el dinero se reembolsa en un periodo entre tres y cinco días hábiles, de lo contrario tardaría un poco más.
La funcionaria reconoce que todos los hospitales tienen farmacias privadas “a unos cuantos pasos”, y agregó: “Entiendo la incomodidad de que no tengamos disponible (la medicina), pero estamos haciendo grandes esfuerzos, sobre todo que pueden poner en peligro a los oncológicos”.
En su opinión, es preferible comprar por mayoreo a reembolsar, pues un Paracetamol lo adquieren en 10 pesos, en contraste con las farmacias privadas, donde aumentan hasta siete veces el precio.
“El proceso de reembolso es sencillo y se le paga al titular, sólo pedimos la factura de la compra, pero en las farmacias está el proceso y requisitos”, insistió.
Hasta el momento han podido cubrir parte de la deuda y tienen pendiente el 20% de la misma (aproximadamente 62 millones de pesos).
Para concluir, Pon Méndez aclaró que los inconvenientes de abasto continuarán durante el año, y aunque los proveedores han demostrado mayor confianza, no han podido liquidar la totalidad de los adeudos existentes.
